OPINIÓN
La asociación GEA (Grupo de Estudios Antropológicos) dedicada a analizar teoría feminista y presidida por Victoria Sau, ideó el proyecto RPA (Reconocimiento, Perdón y Abolición) del Patriarcado.
Hacía tiempo que Victoria venía transmitiendo esta idea: El Patriarcado es una institución inscrita pero no está escrita, como lo están cualquier Estatuto, Constitución o el mismo Decálogo del cristianismo, lo cual permite que se ignore de la enseñanza, tal como se estudian otras civilizaciones, filosofías, religiones o construcciones culturales. De lo contrario, si estuviera escrita, habría un articulado sometido a posibles revisiones, cambios o sustituciones.
También, en una entrevista a Victoria en la revista Meridiana, decía que las mujeres han realizado auditorías a instituciones tales como la familia, la educación, el trabajo, las religiones, la sexualidad; pero faltan otras auditorías pendientes como son: al Fondo Monetario Internacional, a la Gran Banca, y así iba enumerando las instituciones de carácter internacional.
Y en esta línea, comenzó la idea, por parte de la asociación GEA de hacer un proyecto que representara hacer una Auditoría o más bien, un Proceso al Patriarcado, para darle categoría pública. Nos pareció que nos teníamos que dirigir a la institución política más global, la ONU (Organización de las Naciones Unidas), a pesar de que el compromiso adquirido por los 193 países que forman parte de ella, en cuanto a la Declaración de los Derechos Humanos aprobada en el 1948, tenga mucho que desear. Algo parecido a lo que sucede con los compromisos acordados en las Conferencias Mundiales sobre los Derechos de las Mujeres, (México 1975, Copenhague 1980, Nairobi 1985, Beijing 1995 y las posteriores revisiones quinquenales), proyectos que han sido posibles con los esfuerzos realizados por mujeres de todo el mundo.
La fórmula del proyecto era que en algún momento se hiciera un acto en la ONU, una especie de ritual donde quedara constancia del reconocimiento de los agravios infligidos a las mujeres en todos los tiempos y lugares hasta el día de hoy y de esta manera quedara patente, mediante una Declaración, la existencia del Patriarcado y su inminente Abolición. Y a partir de este momento, todos los actos que tuvieran connotación patriarcal fueran considerados fuera de la ley.
Para darle cabida al proyecto, primero se confeccionó una web explicativa del proyecto, con varios textos en diferentes lenguas: catalán, castellano, francés e inglés, y se hizo difusión para obtener firmas de adhesión. Con lo cual, consensuaron este proyecto cerca de 250.000 firmas de 61 países (12 de África, 23 de América, 6 de Asia, Australia y 19 de Europa).
En el marco del II Congreso de Mujeres de Barcelona, el 16 de octubre de 2009, aprovechando la presencia de la directora de UNIFEM de Latinoamérica y Caribe, Gladys Acosta, se le entregó el proyecto con la lista de adhesiones para que pasara la propuesta a la directora de UNIFEM (Fondo de Desarrollo de las Naciones Unidas para la Mujer), en aquellos momentos, Inés Alberdi, de cara a que hiciera de mediadora con la ONU. Más adelante, en febrero de 2010, yo misma, como delegada del grupo GEA y con el apoyo de la concejala Elsa Blasco del ayuntamiento de Barcelona, llevé el proyecto a la cincuenta y cuatro sesión de la Commission on the Status of Women (CSW54) y la Global NGO Forum for Women: Beijing + 15, en el marco de las Naciones Unidas de Nueva York
El tríptico que imprimimos como idea resumen de la explicación de la web del proyecto RPA, en cuatro lenguas: catalán, castellano, francés e inglés, fue el siguiente:
Esta Declaración pretende:
1. Que se reconozca la EXISTENCIA del Patriarcado. Que pase de ser una institución hasta ahora sólo inscrita en el seno de nuestra sociedad, a ser una institución “escrita”, reconocida, declarada. Que se explique desde la enseñanza primaria hasta la universidad.
2. Queremos que se pida Perdón por las exclusiones, agravios y ofensas que se han infligido a las mujeres de todos los países del mundo hasta hoy en día y que el Patriarcado ha establecido:
Exclusión del contrato social, instituido únicamente como contrato social. Esta exclusión engloba todas las demás exclusiones y ofensas, ya que, a partir de este contrato originario, el Patriarcado ha normativizado la política, el derecho, la economía, la guerra, los mitos, las costumbres, etc.
Exclusión de la educación y Exclusión del mundo del trabajo. Se enfatizan estas dos exclusiones, porque sin educación y trabajo no puede haber autonomía.
Implantación de una cultura androcéntrica reproducida a través de todas las instituciones y medios de comunicación, dando un carácter natural a la subordinación y la invisibilidad de las mujeres.
3. Que se promueva la ABOLICIÓN DEL PATRIARCADO, una vez reconocida su existencia, ya que su deslegitimación permitirá avanzar hacia un mundo más justo e igualitario tanto para las mujeres como para los hombres.
Así pues, esta “Declaración por el reconocimiento de la existencia del orden patriarcal y su definitiva abolición” significa, en el ámbito real y en el simbólico, un ANTES del patriarcado y un DESPUÉS del patriarcado, un hito histórico en el devenir de la humanidad
Y desafortunadamente aquí acabó el proyecto, que no tuvo la mediación esperada y no fue más allá de la pedagogía que se pudiera haber hecho en cuanto a divulgación de conceptos explicativos, como por ejemplo la definición de Patriarcado que introduje en uno de los textos, y que ha tenido bastante difusión.
El Patriarcado es una forma de organización política, económica, religiosa y social basada en la idea de autoridad y liderazgo del hombre, en la que se da el predominio de los hombres sobre las mujeres; del marido sobre la esposa; del padre sobre la madre y los hijos e hijas y de la línea de descendencia paterna sobre la materna. El patriarcado surgió de una toma de poder histórico por parte de los hombres, quienes se apropiaron de la sexualidad y reproducción de las mujeres y de su producto, los hijos e hijas, creando al mismo tiempo, un orden simbólico a través de los mitos y la religión que lo perpetuarían como única estructura posible.
