Se dirigen a todas aquellas mujeres que se sienten “huérfanas de representación política” y defienden una agenda feminista que priorice la abolición del género y de la prostitución. Quieren llegar al Parlamento en las próximas Elecciones Generales
Hoy martes ha sido presentado en el Ateneo de Madrid el partido FAC (Feministas al Congreso), que nace fundamentalmente para recoger el “sentir” de muchas “feministas huérfanas de representación política” y para luchar por una agenda feminista que ha sido “abandonada” por todos los grupos que conforman el Parlamento.
“Creemos que lo que se ha denominado como el Gobierno más progresista de la historia ha abandonado la agenda feminista y ha priorizado otras políticas que perjudican a la mitad de la población, que somos las mujeres”, ha expuesto Juana Gallego, vicesecretaria primera de la nueva formación, escritora y profesora de comunicación en la Universidad Autónoma de Barcelona.
Junto a Juana Gallego, encargada de presentar las ideas fundamentales de esta iniciativa, ha participado en la presentación la junta directiva de Feministas al Congreso: Pilar Aguilar, investigadora y crítica audiovisual, que ocupa el cargo de presidenta; Fátima Arranz, profesora de sociología de la Universidad Complutense de Madrid, vicepresidenta; PuriLiétor, psicóloga sanitaria, secretaria general; y Sandra Moreno, abogada y vicesecretaria general segunda de la nueva formación.
Entre las principales prioridades de Feministas al Congreso se encuentra el rechazo a lo que consideran la “redefinición de la naturaleza humana”, representada de manera especial en la ley por los derechos trans planteada por el Gobierno de coalición y que, según han expresado, “redefine lo que ser mujer y hombre, basándose en teorías acientíficas y en postulados ideológicos”.
La llamada autodeterminación de género esconde “el desmantelamiento de la categoría jurídica de sexo, que es donde se construyen los derechos de las mujeres y las niñas”. En ese sentido, las integrantes del nuevo partido consideran que la tramitación de la ley trans debe parar y reclaman un debate “sosegado y profundo”. En su intervención, Juana Gallego ha expuesto algunas de las consecuencias que la aprobación de estas medidas acarrea en campos diversos como el deporte, el sistema penitenciario o la salud, y ha lamentado que se desconozcan los efectos reales que el “cambio de sexo como moda transgresora” puede suponer.
Otros puntos centrales en la agenda que el nuevo partido defiende son: combatir la violencia de género, luchar contra la explotación reproductiva “en todas sus modalidades”, desde los vientres de alquiler a la donación de óvulos, abolir la prostitución o combatir la “cosificación e hipersexualización” de mujeres y niñas y la pornografía. También proponen luchar contra la feminización de la pobreza, la brecha salarial y acabar con las políticas públicas que “desmantelan” los derechos de mujeres y niñas.
En marzo del año pasado un centenar de activistas feministas lanzaron un manifiesto en el que aventuraban la necesidad de llevar la agenda feminista al Congreso de los Diputados. Hoy han explicado que desde aquel momento han recibido más de 2.000 solicitudes de afiliación que están tramitando (entre las que se encuentran exmilitantes de distintos partidos de izquierdas y mujeres que hasta ahora no habían visto la necesidad de afiliarse a ningún partido político). Aseguran que están dispuestas a confluir con todas las feministas e invitan a quien quiera sumarse a la propuesta a hacerlo, advirtiendo que no admitirán la doble militancia.
Fotos: AmecoPress
