jueves 02 mayo 2024

jueves 02 mayo 2024

Vacuna contra el VPH y el interés real por la salud

La apuesta del Estado español por la calendarización de la vacuna contra el cáncer cervical se basa en la afirmación de que el cáncer ha aumentado su prevalencia en España en los últimos años debido entre otras causas, y según un estudio realizado por el Instituto Catalán de Oncología (ICO), a los cambios que se han producido en los hábitos sexuales de la población: se adelanta el inicio de actividades sexuales y se amplia el número de parejas.



 

De acuerdo a los datos obtenidos por los especialistas catalanes, del análisis de una muestra representativa de la población femenina, que ha incluido a 3.200 mujeres de entre 18 y 65 años, se estima que un 14% de las mujeres españolas (dos millones en total) ya están infectadas por el VPH, y que este porcentaje alcanza un 29% cuando sólo se tiene en cuenta al grupo de mujeres con edades comprendidas entre los 18 y los 25 años.

En la investigación del ICO (publicado en el Journal of Medical Virology), la gran mayoría de los tipos del virus que se diagnosticaron (un 84%) eran cepas de alto riesgo, como el VPH 16 que se considera el principal responsable de la aparición de cáncer de cuello de útero, y que fue el que se detectó con mayor frecuencia. Asimismo, desde este equipo de investigadores (casual e íntimamente ligados al equipo de Harald zur Hausen, Premio Nobel de Medicina en 2008, al desarrollar la vacuna) se advierte que los resultados revelan que la infección por VPH, además de ser la enfermedad de transmisión sexual más común a nivel mundial, también es más frecuente en España de lo que se pensaba, y solicitan que “se extiendan las medidas preventivas, como la vacuna contra el virus, tanto a mujeres de 18 a 26 años –que actualmente no están incluidas en la campaña de vacunación de la sanidad pública–, como a las que ya están infectadas”.

Lo que hay detrás de estas investigaciones

Estas afirmaciones, se repiten en las publicaciones sobre la eficacia de las vacunas contra el Virus Papiloma Humano (VPH), generalmente realizadas por investigadores con serios conflictos de interés, relacionados a nivel de financiamiento con los laboratorios fabricantes. En el caso del ICO, los estudios financiados que han permitido desarrollar la primera vacuna contra un cáncer (el de cuello de útero), han permitido que este grupo coordine en España los ensayos internacionales multicéntricos de estas vacunas.

La campaña del miedo generada en toda Europa y ahora en países en vías de desarrollo, y que brota de tanto en tanto para que ese miedo no pierda fuerza, generó un entusiasmo pocas veces visto por estas nuevas vacunas. Las autoridades de salud de muchos países, incluso los que están en vías de desarrollo como Perú y Panamá, las incorporaron en sus programas nacionales de vacunación, con el gasto que esto conlleva.

Efectivamente, para evitar la muerte de mujeres en edad reproductiva, una vacuna contra el cáncer cervical, puede ser un hito científico e histórico. Actualmente, esta vacuna -incluida en el Calendario Vacunal de España y la mayoría de los países de Europa- confiere protección a las mujeres frente a los serotipos virales 6,11,16 y 18.

La pregunta es si son estos los serotipos más frecuentemente encontrados en las lesiones cervicales de las mujeres de nuestro país? El serotipo 16 es el más frecuentemente encontrado en las citologías de mujeres con lesiones cervicales de bajo y de alto grado, al menos en la comunidad de Madrid, y que al parecer, se repite en el estudio del ICO, en Barcelona. Sin embargo, el serotipo 18 (que tambien quedaría “cubierto” por la vacuna), se encontró en un bajo porcentaje de mujeres, incluidas aquellas con una lesión de alto grado. En definitiva, a nivel de porcentajes los más presentes son: del 16 (51%), 52 (14%), 31 (11%), 33 (10%) y 58 (8%). Es decir: la vacuna no solamente deja descubiertos la mayoría de genotipos del virus que son más frecuentes en nuestra región, sino que tampoco se conoce si la vacuna aumentará aún más la frecuencia de los serotipos no incluidos en la vacuna, cuando se consiga la erradicación del 16 y 18.

Los estudios centrados en la vacuna (fuera del ámbito farmacéutico) insisten en que mientras no queden esclarecidas las diversas dudas sobre el futuro el VPH, son las citologías periódicas el mejor método de prevención de cáncer de cérvix, incluso en mujeres vacunadas. Este es el tipo de acciones estatales que se deberían efectuar tanto en mujeres como en hombres, pero en la situación actual, al parecer, se prefiere priorizar en un gasto de vacunación, que en uno de prevención en hospitales públicos y de calidad.

La misma estrategia mercantil que con otros tipos de virus

Vienen a la memoria las diversas estratégias para “colocar” un método profiláctico (es decir pre-infección). Es el caso de la profiláxis ofrecida a colectivos que están más expuestos al VIH/sida por diversos motivos, pero sobretodo, como método de prevención de personas “sanas” ante un “comportamiento de riesgo”. De esta manera, la venta de antirretrovirales (en el caso del VIH) aumenta de manera proporcional al comportamiento de riesgo. Uno de los argumentos para usar este tipo de tratamiento pre-exposición es que si funciona para mujeres embarazadas portadoras del VIH que toman el tratamiento ARV para no transmitir el virus al feto, porqué no ha de funcionar para cuando sales, te tomas unas copas demás, te enrrollas y tienes sexo sin protección o en el peor de los casos, hay un ataque sexual y -por protocolo médico- son administrados ARV, coctel imprescindible ante una posible exposición al VIH.

En el caso de la vacuna contra el VPH, se apelan a estos “comportamientos de riesgo” para imponer la profilaxis como una manera fiable de no contraer este virus, dejando al margen el hecho importantísimo de que -además de la falacia de la edad de “iniciación” como argumento- se debe educar para la prevención y no para la profilaxis, así como ofrecer desde el sistema sanitario público una revisión citológica anual y de calidad para cada persona que viva en el país.

Según valiosas prácticas de trabajo comunitario en países donde estas infecciones se producen y no se tratan o no se preveen desde el estado, han quedado demostrados con evidencias científicas igual mente o más válidas que el mejor método para prevenir el VPH en sociedades donde no hay conflicto y donde la mujer es una igual al hombre es -sin duda alguna- el uso de preservativo, sexo oral y anal igualmente protegidos, sin importar si es con tu pareja estable o con otras, o si practicas la monogamia o tengas multitud de parejas, tengas 14 o 70 años. Esa información, es la que no nos llega: la que cuesta poco, pero en realidad, es la que más valor tiene.

Compartir

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Fabiola Llanos

Fabiola Llanos

Ecofeminista. Periodista i comunicadora social xilena / catalana. Especialitzada en imatge, arts gràfiques, producció audiovisual, neurolingüística i drets de les dones. Vaig parir La Periòdica. Co fundadora de La Independent.
Search

There is no Event

Butlletí de notícies

Subscriu-te al nostre butlletí setmanal amb les darreres notícies publicades.

També et pot interessar

El Gobierno central aprueba el proyecto de Ley Integral para la Igualdad de Trato

El texto añade la ‘identidad sexual’ y ‘la enfermedad’ como dos nuevos motivos de discriminación...

LOGO_OCG

Declaració institucional del 8 de març de 2023, Dia Internacional de les Dones

No naixem feministes; podríem dir, adaptant la icònica frase de Simone de Beauvoir, que arribem...

Diversidad de colectivos dicen Stop a VOX y al racismo en Barcelona

La cita fue allí, en el Paseo de Gracia con Roselló de Barcelona, donde se...