Xavier Puigdollers, Director General de Asuntos Religiosos de la Generalitat de Catalunya, entrevistado por La Independient afirma: “La diversidad religiosa es un reto. La presencia de las religiones minoritarias en Catalunya se ha incrementado notablemente a raíz del fenómeno migratorio. Pero en la vivencia de cada confesión la administración no debe entrar. Lo que debe garantizar la administración es que las confesiones tengan la posibilidad de practicar y desarrollarse “.
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Estos días la práctica de la religión ha sido portada porque el gobierno de la Generalitat ha aprobado la reforma de la Ley de culto, que elimina la obligación de los ayuntamientos de reservar suelo para la construcción de centros religiosos a partir de 2019. Por otro lado, hablar de religiones y creencias siempre está de actualidad por su relevancia en la vida de las personas y especialmente en la de las mujeres, ya que en la mayoría de las religiones rezuma la ideología patriarcal y en algunas lo hace con toda su contundencia.
Esta área específica del Gobierno sobre los Asuntos Religiosos, creada durante la última legislatura de Jordi Pujol, es la única en todo el Estado Español y Xavier Puigdollers -que ha presidido la Comisión de Bienestar Social de UDC y fue Director General de Atención a la Infancia y la Adolescencia de la Generalitat- ha impulsado el Consejo Asesor para la Diversidad Religiosa. Este abogado de profesión -también profesor de derecho civil en la Universidad Abat Oliba- siempre ha estado muy vinculado a entidades sociales. Nos recibe en su despacho donde al poco tiempo de iniciar la entrevista comprobamos su capacidad de diálogo y su saber escuchar.
Hablemos del Consejo Asesor… ¿Cuántas religiones “tenemos” en este momento?
Uno piensa que hay tres o cuatro grandes… y luego resulta que hay más, no tan conocidas, y dentro de cada confesión hay muchas familias y muchas sensibilidades. El diálogo y el contacto dentro de la confesión, con unas se hace de una manera y con otras de otra porque no hay una representación única. Con el Consejo Asesor se quiso recoger la gran variedad de sensibilidades religiosas y disciplinas académicas para poder reflexionar con libertad.
¿Qué es lo que buscaban? ¿Cuál era el objetivo?
No se buscaba un interlocutor de las confesiones religiosas para poder hablar sino un organismo que pudiera reflexionar. Por eso no se integraron dentro de este consejo representantes oficiales de las confesiones (con los que ya tenemos otros espacios para tratar los temas del día a día) sino que se quería un espacio de personas muy sensibilizadas y con grandes conocimientos, para que se pudieran plantear y ofrecer asesoramiento respecto a una serie de cuestiones desde el conocimiento de la diversidad religiosa existente en Cataluña.
Y las decisiones ….
Las decisiones, evidentemente, las tomará el Gobierno; y el contacto directo, concreto, con cada religión se tendrá con la representación oficial y formal de la religión. Se trata de espacios diferentes.
En todas las confesiones hay asociaciones de mujeres, muchas de ellas muy activas. Por ejemplo, en la católica destacan el Colectivo de Mujeres en la Iglesia y Somos Iglesia. También se han hecho Jornadas de Mujer e Islam. ¿Con qué asociaciones o colectivos de mujeres se relacionan? Algunas de estas mujeres forman parte del Consejo Asesor?
Efectivamente, el asociacionismo femenino en el ámbito religioso es muy activo. Además de las congregaciones religiosas femeninas en el ámbito católico, las mujeres protestantes suelen agruparse en un ministerio de mujeres en la mayoría de iglesias. En relación al islam, el Consejo islámico dispone de una comisión específica que ha celebrado algunos congresos. Y en otras religiones más minoritarias, como los bahá’ís, el progreso de la mujer incluso es un precepto.
¿Cuál es su valoración sobre las aportaciones que han realizado estas asociaciones de mujeres?
El gobierno ve con muy buenos ojos esta realidad, tanto para la promoción de la mujer que significa, como por el hecho de mostrar la vitalidad de las religiones. La Dirección General de Asuntos Religiosos apoya muchas iniciativas confesionales que fomentan los derechos de las mujeres o que promueven asociaciones de mujeres.
Miembros de la Generalitat han manifestado “después de las elecciones regularemos el burka”… ¿Nos puede hablar un poco de ello?
Éstos son temas que salen y que algún día, ya que han salido, se deberá hablar. La cuestión del burka no es un tema religioso y, por tanto, no lo enfocaría desde aquí. Es un tema más de seguridad pública, de saber quién está bajo el burka, si alguien se esconde. Pienso que es un tema de los que hay que tratar con calma y tranquilidad.
El burka es un velo integral, pero luego está el hiyab, que no es integral, se ve toda la cara… ¿Qué piensa usted de la utilización del hiyab?
El velo, genéricamente, puede tener una importancia, un significado religioso. Pero también mucha gente cuando llega el verano lleva un pañuelo en la cabeza para protegerse del calor, o en invierno para protegerse del frío… o por coquetería, sin ningún significado religioso, y no porque sean mujeres practicantes del Islam… Socialmente el velo puede representar una cosa u otra en diferentes momentos de la historia, de cada pueblo y de cada civilización. Creo que también entre las musulmanas se puede vivir el gusto por el velo desde muchos sentidos. En este aspecto también hay que tener mucho cuidado para no herir sensibilidades de personas que en un momento determinado se ponen o se le quitan, o lo llevan más o menos cerrado… aquí puede haber sensibilidades diversas.
¿Piensa que todo esto irá evolucionando?
Posiblemente. No es lo mismo aquí en nuestra sociedad, con una serie de valores, con una serie de culturas, que los que vienen de fuera y tienen un choque respecto a su país. Debemos permitir que se vayan integrando, que vayan evolucionando …
Debemos confiar en la libertad de la persona, en el sentido común, y que las cosas se deben hacer según la realidad social. Todo lo que pueda representar ir en contra de la libertad de la persona sería grave, hay que evitarlo. Evitar que alguien se vea obligado a llevar una pieza que no quiera llevar o que sea una forma de represión de la persona. Y hay que evitar también que no tenga la libertad de llevar la pieza que desee. Se irá estudiando, poco a poco, pero creo que es bueno hacerlo con tranquilidad, con reflexión, con paz, más que un debate a puerta abierta, que al final nos despiste a todos.
¿Y cuál es su opinión sobre el papel de la mujer musulmana?
Yo les digo: Participad activamente también en la sociedad, en la vida social en las entidades del barrio, con la vecindad, en la escalera, en la biblioteca, en la entidad cultural, deportiva; como hace, en general, la mujer en este país. Que eviten cerrarse y que participen plenamente en la vida social.
Tengo entendido que en Cataluña viven más de 300.000 personas de religión musulmana, y ello conlleva asumir temas delicados como la autorización de creación de mezquitas. Hablemos de las mezquitas. ¿Dónde están las mezquitas? ¿Donde se quieren hacer?
A veces la prensa hace comentarios, salen noticias que no responden a la realidad. Más que mezquitas podríamos hablar de oratorios. Hay muchos, más grandes o más pequeños. Se trata del lugar de oración, de encuentro, y los musulmanes deben hacerlos cerca de donde viven. Van surgiendo según las necesidades …
Y en Barcelona, ¿habrá una gran mezquita?
Quizás sí, es posible, cuando socialmente sea el momento, cuando exista la necesidad, el lugar adecuado, las posibilidades económicas de hacerlo… pero no es ahora el tema que se plantea. En cada población tienen una fiesta que ya empieza a ser tradicional: el día de puertas abiertas abren sus oratorios para que quien quiera pueda entrar… Y este año me invitaron y asistí, participé en el acto formal, en Vallcarca, donde inauguraron un nuevo oratorio… ¿Por qué lo hicieron? Porque ya había un número suficiente de población interesada. Yo creo que es bueno que las cosas vayan avanzando gradualmente, según las necesidades. Y si lo hacemos así, en el momento social adecuado, con paz y tranquilidad, con suficiente diálogo, será más fácil.
Es decir, en principio están abiertos a escuchar todas estas peticiones ….
Las tenemos que escuchar. Una de nuestras funciones es escuchar. A partir de ahí, se avanzará, repito, con la paz y tranquilidad que todo esto necesita.
