Cómo se ha tratado el tema de las jerarquías entre hombres y mujeres y dentro del movimiento feminista?; cómo se encara el trabajo productivo y reproductivo como fuente de explotación?; cómo actúa la religión que define la identidad de las mujeres y decide sobre el cuerpo de las mujeres; cómo se trata la diversidad sexual y los múltiples géneros?; cómo se reconocen y se incorporan los movimientos y las preoucupaciones sobre minorías?
Estas han sido las questions surgidas en estos Diálogos Feministas en Dakar.
El objetivo de los Diálogos Feministas Inter-Movimientos se promover justamente el diálogo entre feministas para fortalecer las relaciones entre los movimientos de mujer es y su acción política en espacios locales y globales.
Las organizaciones feministas convocantes fueran: Articulación Feminista Marcosur, Comité miedo la Anulación de la Deuda del Tercero Mundo (CADTM), Federación Democrática Internacional de Mujeres (FDIM), Femnet, Marcha Mundial de las Mujeres y Vía Campesina.
La inauguración, después de 3 cambios de localización por cuestiones logísticas de la organización del FSM 2011, se hace bajo una carpa y alrededor de una pancarta con el lema “Tu boca es fundamental contra los fundamentalismos”, lema popularizado por el colectivo Cotidiano Mujer del Uruguay, que pertenece a la Associación Feminista Marcosur (AFM ).
Intervenciones
La introducción fue a cargo de Virginia Vargas de AFM América Latina, que explicó que Marcosur había invitado a varias mujeres de diferentes organizaciones del mundo con mucha experiencia desde el feminismo para reflexionar sobre el surgimiento de nuevas miradas y nuevos paradigmas y para repensar y reformular el feminismo: “Hay que recuperar la capacidad de formular nuevas propuestas feministas” dijo Vargas. Estas nuevas miradas provienen de los: Movimientos feministas indígenas y de los movimientos feministas de las comunidades africanas y asiatiques. En parte quizás se trata de “ennegrecer el feminismo”. También de las mujeres jóvenes y de los movimientos LGBT.
Los paneles fueron moderados por Nandita Shah (Akshara, India) y intervinieron: Alexandra Mecozzi del Movimientos de Trabajadoras de Italia, Betania Ávila (Brasil) de los Movimientos Feministas de América Latina, Cecilia Moreno de la Red Afrocaribeña y de la Diáspora de Panamá Red Afrocaribeña y Phumi Mtetwa de los movimientos trans de Africa.
Por Alexandra Mecozzi ( dirigente del CGL, sindicado de la metalúrgia) hay que tener presente como la crisis hace impacto en la vida de las mujeres, en su condición y en sus luchas. La crisis es económica y social pero también es cultural y política e implica la llamada crisis de las civilizaciones.
En cuanto al primer aspecto, su impacto ha sido más fuerte este año que el año pasado y ha hecho que las mujeres tengan mucha presencia a las luchas actuales sobre derechos, salarios y negociaciones colectivas puesto que la precarización del trabajo es en las mujeres donde hace mayores estragos. La incertidumbre laboral y los salarios exiguos crean dificultades todavía mayores en la vida cotidiana de las mujeres y en sus esfuerzos de conciliación con la cura de la familia. También la privatización de los servicios públicos oscurece todavía más la situación actual.
Referente al segundo aspecto, el cultural y político, la crisis está representando una regresión. En cuanto a la libertad de las mujeres, ha habido un resurgimiento del imaginario del cuerpo ligado al dinero y al poder y aquí tienen mucho que ver los medios de comunicación. En cuanto a Italia entre el Gobierno y el Vaticano la presión es muy fuerte y las mujeres, hasta ahora, no habían reaccionado mucho y la actitud del izquierda tiene un tono muy bajo. Los movimientos sociales junto con los movimientos de mujeres son vitales para salir pronto de esta situación.
Mecozzi reflexiona en voz alta: “ A los hombres no les tenemos que pedir ayuda, son ellos los que deben de actuar poniendo en discusión el modelo masculino”.
Para Betania Ávila, que procede de una región del noroeste del Brasil, hay dos cuestiones principales en América Latina: el proceso de democratización de la región y la crisis económica que genera tensión entre los movimientos sociales y los nuevos gobiernos democráticos.
El movimiento feminista de América Latina está luchando por la igualdad, por la emancipación
de las mujeres, por un proceso de democratización política, por la democratización de la vida social y de la vida cotidiana.
En el movimiento feminista hay un cuestionamiento abierto de la s prácticas jerárquicas pero esto no significa que no haya tensiones. A pesar de estas tensiones se puede afirmar pero que es un movimiento abierto que incorpora nuevas propuestas y nuevas estrategias.
El movimiento feminista indígena ha cuestionado muchos conceptos y prácticas del movimiento feminista, como lo ha hecho también el movimiento de las mujeres feministas negras en temas raciales y también hay que contar en las estrategias para el futuro del feminismo con las aportaciones de los movimientos lésbicos y transsexuales.
En América Latina tiene una especial importancia la realidad del trabajo doméstico, el trabajo de las trabajadoras domésticas que liberan a las mujeres de clase media a expensas de la desestructuración de sus familias y que incide en la desigualdad entre las mujeres. El movimiento feminista necesita un compromiso de solidaridad hacia las trabajadoras domésticas. Está claro que la carencia de políticas sociales se suple con el trabajo de las propias mujeres.
En cuanto a la religión, la iglesia católica ha dominado históricamente muy fuertemente losestados y las otras religiones: las indígenas, las afro y las otras iglesias cristianas. Esta historia comporta que la lucha para la legalización del aborto sea muy dura y todavía no se vea el horizonte. Hace falta una transformación estructural fuerte y potente sobre el aborto y las políticas públicas de salud y la contracepción, asi como que el embarazo sea una decisión libre.
Para el feminismo la autonomía sobre el cuerpo y la sujeto es fundamental. Para rehusar el machismo hay que avanzar en el sentido de esta autonomía en relación a sus significados, generar nuevas cuestiones críticas sobre estos significados: cuerpo, igualdad, sujeto, relación entre poder y cuerpo, jerarquía. Estos conceptos no son iguales para cada mujer.
Para Cecilia Moreno, de Panamá, trabajar en los movimientos de mujeres afrodescendientes ha sido una parte del proceso trabajado en el feminismo. Descubrir las diversidades y ser conscientes que lamayoría de organizaciones feministas de su país descubrieron Beijing en 2000. La mayoría de mujeres viven excluidas de la información dentro del paradigma colonial que excluye a la población afrodescendiente.
Las mujeres africanas viven un modelo patriarcal muy potente dentro de sus sociedades. Por lotanto tienen mayor vulnerabilidad por el racismo, la pobreza y la carencia de información. Viven en la negación de sus raíces históricas, la propia cultura les es desconocida.
Para esta representante de la Red Afrocaribeña, el paradigma del feminismo es la democracia, la participación en igualdad: “ ¿Cómo conseguir esta autonomía a partir de las identidades de las mujeres?, ¿cómo afrontar el fundamentalismo que nos impide aliarnos entre nosotras?
Se responde Moreno a si misma, que hay que traducir y traer el mensaje del feminismo a las mujeres afrodescendentes. Brasil, Colombia y Ecuador han trabajado mucho en esta línea, en cambio en Panamá se ha retrocedido. La Cumbre Mundial de Mujeres Afrodescendiente del 11 al 22 de agosto del 2011 en la selva de Honduras es la gran oportunidad para avanzar.
Virginia Vargas, no quiso cerrar el turno de las intervenciones de las organizadoras sin recordar las reflexiones de Phumi Mtetwa, de África ( la cual debido a cambios de la logística del FSM 2011 no se hallaba en la carpa). Mtetwa es una de las liderezas más relevante de los movimientos trans de África y una luchadora incansable contra los gobiernos africanos y sus leyes que reprimen la homosexualidad y el lesbianismo y que conducen directamente a los asesinatos de las personas con esta identidad sexual o a las “violaciones correctivas” aplicadas normalmente por grupos de hombres a las lesbianas a fin de que “se curen”. La Independent ya denunció recientemente estos actos crueles en Sudáfrica.
Una vez abierto el debate, Lilian Celiberti de Marcosur y Cotidiano Mujer del Uruguay preguntó a la italiana Alexandra Mecozzi : “¿Si enlos 70 las feministas italianas fueron inspiración para las de todo el mundo, ahora -50años después y con el impacto negativo- como generamos un debate global para ver como partimos desde nuestros errores?. ¿Hemos interactuado poco con la política, con dirigentes?
Para Mecozzi es cierto que el movimiento feminista a pesar de ser fuerte no ha cambiado la política, no ha cambiado la sociedad. Pero hay que saber que detrás la política de derechas y reaccionarias hay un poder económico y financiero fortísimo. Pero la lucha de las mujeres de los años 60 y 70 ha cambiado mucho la sociedad, por ejemplo en la Universidad, donde hoy hay una nueva generación de mujeres jóvenes estudiantes que reivindica el protagonismo social y cambios en las acciones de los gobiernos. Para cambiar la política y la economía “hacen falta alianzas más grandes, con mujeres de todas partes, mestizas, árabes, … y no temer al poder”.
Para la antropóloga italiana Giselle Evangelisti, residente en Barcelona y con muchos años de trabajo de campo en la selva amazónica de Perú, el habitat y el buen vivir son temas reivindicativos de las mujeres en todo el planeta. El movimiento indígena se ha plantado y las mujeres, que hace 20 años eran excluidas de las reuniones de las comunidades, hoy luchan contra las represas, también las que ha planificado el gobierno de Lula y que ahora continúa Dilma Rousseff. El tema del medio ambiente se refiere mucho a las mujeres y hay que ver como actuarán los nuevos gobiernos democráticos y las mujeres al frente de la política.
Perla Wilsón, pertenece a AMARC, la asociación de radios comunitarias, y denuncia la ausencia de los medios en la visibilitzación de las mujeres y su lucha. Por eso AMARC trabaja el empoderamiento de las mujeres en las radios comunitarias, tanto para hacer oir sus voces como para responsabilizarlas de la gestión de sus propios medios de comunicación. Estas mujeres ya empoderadas han trabajado mucho por los Derechos Humanos y las Derechos de las Mujeres.
En Argentina se ha conseguido la mejor ley de radios de toda América Latina. Y en esta línea se ha estado trabajando en Uruguay y en Brasil. En este último país el gobierno Lula no cumplió, se espera por lo tanto que sea Dilma Rousseff quién saque adelante la nueva ley tal y como afirmaba el 7 de febrero el Ministro de la Presidencia, comprometiéndose con la Reforma.
En estos días tanto importantes para su país, Túnez, Corinna Cumani, considera muy importante la conexión política feminista con la crisis de las civilizaciones: “¿Cómo podemos centrarnos en nosotras mismas y enfrentarnos con el poder dominante?. Tenemos que crear una nueva cosmología, una nueva concepción del poder. Tenemos que encontrar una definición. Los diferentes poderes ¿Qué diferencias tienen? ¿Qué poder queremos practicar nosotras?…”.
Para esta feminista tunecina si la relación con la naturaleza es muy importante para las mujeres también es capital como estas la piensan utilizar. La pobreza es uno de los otros temas a tratar.
Para cambiar la actitud ante estas y tantas otras cuestiones hace falta otro imaginario colectivo, otros Derechos Humanos, otra manera de entender la soberanía y el desarrollo: “Si no revisamos nuestras acciones y reflexiones no encontraremos una nueva visión que nos una. La política en el sentido de todo el mundo igual, un voto para cada persona pero bajo un poder dominante no nos hace iguales en la realidad. No tenemos instituciones, tenemos destituciones.”.
En resumen, para Cumani, es básico encontrar otra manera más epistemológica de hacer la política, trascendiendo y traspasando el poder actual. Esta nueva cosmología tienen que repensarla las mujeres y sin duda se opone a la actual que es muy individualista.
Las intervenciones se sucedieron y se acordaron mayoritariamente los objetivos esperados por las asociaciones organizadoras.
Objetivos
Los objetivos consensuados fueron: Dar visibilidad y compartir las experiencias de las luchas de las mujeres en el mundo, en particular en África y difundir los debates de las actividades realizadas en el marco del FSM; construir consenso cara a fortalecer acciones comunes entre las participantes, mujeres de organizaciones y movimientos feministas de todas las regiones del mundo; presentar análisis y propuestas desde las mujeres para la Asamblea de convergencia de Mujeres del FSM y hacia la continuidad del proceso Foro Social Mundial.