Entre las feministas indignadas hay la Asamblea feminista creada en la acampada de la Plaza Cataluña y vinculada al movimiento 15M.
Este año también están presentes en los actos 12M-15M . Han realizado una Intervención*en la Asamblea General de Plaza Cataluña del 13M y bajo el lema “Nunca más solas, banqueros a la cazuela, ni un paso atrás” explican que para ellas este año ha sido: “Un año gritando que la revolución será feminista o no será “.
“Un año organizando y participando en las manifestaciones y acciones. Un año de asamblea en las plazas y en diferentes espacios en los barrios. Un año tejiendo vínculos feministas. Un año perdiendo juntas el miedo. Un año creando un espacio por donde muchas hemos transitado, participado, aportado … “
Hacen suyo el escrito de Claudia Korol (Buenos Aires): “Ahora que estamos recuperando nuestras plazas, también podemos proponernos el debate sobre nuestros espacios en las casas, en la vida cotidiana, en la realidad del día a día. Debatir el lugar de la familia, los roles que sostiene, los autoritarismos que reproduce, como lugar de afirmación del patriarcado. Imaginar nuevas formas de vivir nuestras relaciones, en casa, en la plaza, y también en las organizaciones populares que nacent o se van transformando atravesadas por este tiempo histórico insurgente “
*Intervención de Feministes Indignades en la Asamblea General de Pza. Cataluña del 13 de mayo de 2012
Hace un año que millones de personas tomamos las plazas para decir que no somos mercancía de políticos y banqueros, y apostamos por un proceso de transformación social y económica que ponga la vida de las personas en el centro. Algunos dicen que durante este año no hemos cambiado nada, pero es mentira: hemos puesto en marcha cientos, miles de procesos de organización horizontal, de confluencia desde la diversidad y el respeto, para pensar y hacer política y economía desde abajo y en primera persona.
Desde Feministas Indignadas rechazamos la concepción productivista de las luchas políticas porque sabemos que los procesos de transformación profunda son lentos. Lo sabemos porque la lucha feminista por la entrada de las mujeres en el espacio público duró siglos y ahora no tiene marcha atrás. Entramos en el espacio público en condiciones de desigualdad, precariedad e invisibilidad al trabajo remunerado y seguimos haciendo el trabajo doméstico, reproductivo y de cuidado de forma invisible, impagada y minusvalorada, y el trabajo sexual de forma estigmatizada y perseguida.
Por eso, ahora hace un año, vinimos a la plaza a aportar una visión feminista de las crisis y del nuevo giro del capitalismo salvaje: a explicar que los recortes y las reformas nos roban la vida a todas, pero reparten los papeles de forma diferentes según si somos hombres, mujeres, lesbianas, transexuales, transgénero o intersexuales … Y si además somos de un color de piel diferente al blanco o migramos desde países del Sur, todavía lo tenemos peor. Hemos estado un año explicando que los recortes en la sanidad y educación públicas, a las ayudas familiares, la cooperación, las ayudas a las personas en situación de exclusión, suponen más carga de trabajo para las mujeres. Los ajustes estructurales se amortigüan en las familias, y eso quiere decir que lo hacen las mujeres. Además, estos ajustes aumentan la feminización de la pobreza. Hemos explicado también que la reforma laboral, de pensiones, de la negociación colectiva … persiguen el retorno de las mujeres al hogar. Además, la anunciada reforma de la ley de aborto impedirá las mujeres menores de 18 años decidir por sí mismas y nos dificultará aún más el acceso al aborto libre y gratuito. Esto implica una nueva medida para controlar nuestros cuerpos y que cada persona cumpla un papel según el modelo de familia tradicional: quieren abocarnos a las maternidades no deseadas, a las sexualidades oprimidas y sumisas y a las relaciones insanas.
Queremos que tengáis claro que la solución que bancos, gobiernos y multinacionales han escogido para salir de la crisis y seguir viviendo a costa nuestra es que las mujeres cargamos con todo el trabajo doméstico, reproductivo y de cuidados de forma invisible e impagada, cumpliendo nuestro rol tradicional. Y por tanto, que responder a la ofensiva misógina contra los derechos de las mujeres es defender los derechos y la supervivencia de todo el mundo.
Un año después del inicio del 15M, pensamos que la estrategia de visibilizarnos cómo feminismos diversos e independientes en este proceso ha dado fruto: por ejemplo, el manifiesto la convocatoria del # 12M15M en Barcelona incluye dos reivindicaciones específicas que hemos planteado, como el reconocimiento del trabajo doméstico, reproductivo y de cuidado y el derecho al propio cuerpo. Otro ejemplo es el hecho de que varias asambleas vinculadas al 15M han apoyado la campaña de Prostitutas Indignadas contra la persecución de las prostitutas en las calles de Barcelona.
Pero, creemos que debemos ir más lejos y superar la división sexual del trabajo político, las jerarquías y el autoritarismo, en las tareas de apoyo a las personas represaliadas en las movilizaciones; el sostenimiento, facilitación y dinamización de las asambleas y el sostenimiento de nuestros hogares y activismos. Creemos que debemos seguir haciendo acciones inclusivas, teniendo en cuenta la participación, el cuidado y la seguridad de todo el mundo y el hecho de que somos interdependientes. Si decimos que si tocan a una nos tocan a todas, quiere decir que sabemos que todo lo que hacemos cuando estamos juntas en la calle nos repercute a todas. Creemos que tenemos que hacer un esfuerzo para confluir y no competir, sumar y no restar, porque si estamos todas juntas sí lo podemos todo. Creemos que debemos seguir creando redes de apoyo mutuo y alternativas anticapitalistas y feministas en el trabajo productivo y reproductivo, en la salud, la crianza y el envejecimiento dignas, en la vivienda … Y creemos que el hecho de que haya unos feminismos visibles, varios e independientes dentro del proceso del 15M es garantía y condición para que podamos hacer una revolución que acabe con las desigualdades de género, clase y etnia. Por ello, seguimos y seguiremos en las calles!
