Con esta sentencia comenzó la rueda de prensa de hoy a las 11 en el Col·legi de Periodistes de Catalunya, convocada por el Comité 1r Diciembre-Plataforma Unitaria de ONG-SIDA de Cataluña – C1D, plataforma de 25 entidades que trabajan ofreciendo servicios en prevención y atención a las personas afectadas por el VIH/sida en todo el territorio catalán. Para esta convocatoria contaron con la colaboración de la Xarxa Internacional de Dones Periodistes i Comunicadores de Catalunya – XIDPIC.CAT.
En esta ocasión, Marta Carrera, de la Associació catalana en Defensa de la sanidad pública, Antoni Barberà, Plataforma DEMPEUS por la Salut Pública y Montse Pineda, Presidenta del Comité 1 de Diciembre acusaron al gobierno catalán, personificado por el Presidente de la Generalitat, de ser culpable del no cumplimiento de los derechos de las personas que viven con el VIH/sida.
Con el mensaje de una regresión histórica en lo que respecta al estado del bienestar y la salud, Baberà, Carrera y Pineda coincidieron en que estos recortes se solapan sistemáticamente: desde el Estado Central y desde el gobierno de la Generalitat, nos han llevado a una situación insostenible, calificando los recortes en ámbitos como la salud de “mezquinos”, y que supondrán que lo pagaremos muy caro. “Después de 30 años demostrando eficiencia, eficacia, y solvencia del trabajo hecho por las entidades que trabajan en el entorno del VIH/sida, estos recortes no suponen más que atacar y crear una situación de exclusión de atención desde la perspectiva de salud pública”, señaló Barberà.
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Haciendo un llamado a las sociedades científicas a que expliquen con bibliografía, lo que pasa cuando se pierde universalidad, cuando se excluye del sistema, se hizo un detalle histórico del proceso de recortes del sector social de atención y prevención del VIH/sida. Según la Plataforma C1D, tienen un perfil activo en su desarrollo, dado que la implementación del mismo depende, en gran medida, del trabajo directo que realizan sus entidades.
“El septiembre de 2011, el Departament de Salut decidió reubicar el PPAS y la Subdirecció General de Drogues, que abordaba la problemática del VIH en personas usuarias de drogas, como dos de las ocho líneas prioritarias de la Dirección de Promoción de la Agencia. El C1D alertó entonces que la supresión de una política específica implicaría un perjuicio en la asignación de presupuestos y tendría graves consecuencias en la calidad de vida de las personas que viven con VIH, así como en el resto de población. Hoy fueron más lejos”.
Consecuencias previstas de los recortes de nuestro gobierno.
Con la partida presupuestaria destinada este 2012 en los programas de abordaje integral del sida el C1D dice que se hace inviable la aplicación del Plan de Acción 2010-2013 de la Comisión Interdepartamental del Sida de la Generalitat de Cataluña. Por lo tanto, desde el C1D se considera que el Gobierno está mostrando una nula sensibilidad hacia esta problemática. Si se mantiene la previsión a dos años del Gobierno ha reducido el presupuesto a las entidades en 48%. El 2010, las entidades hemos atendido a 25.000 personas y hemos repartido dos millones de preservativos a trabajadoras sexuales, jóvenes, hombres que tienen sexo con hombres y población en general.
Si los programas de prevención desaparecen y la distribución de material preventivo disminuye, es previsible un aumento de nuevas infecciones por VIH (y otras Infecciones de Transmisión Sexual) en Cataluña, con el consecuente incremento del coste en gasto sanitario. ONUSIDA y expertos en todo el mundo señalan que si se mira reducir costes, nunca se tiene que hacer en salud publica. Es evidente que es más económico invertir en la prevención del VIH y otras ITS que en su tratamiento a posteriori. Las ONG denuncian el sufrimiento de las personas que viven/vivirán con VIH y que las nuevas infecciones podrían haberse evitado con medidas y políticas eficaces.
La reducción de políticas activas de sensibilización aumentará el estigma y discriminación de las personas que viven con VIH, comportará un mayor retraso en los diagnósticos, el que implica que llegarán a los hospitales en estadios avanzados de la enfermedad. En conjunto, esta situación comporta un encarecimiento en la atención clínica de la epidemia.
La imposibilidad de sostenimiento económico de muchas ONG comportará la desaparición de gran parte del tejido asociativo de lucha contra el VIH/sida en Cataluña, un modelo de referencia especializado en la atención a poblaciones especialmente vulnerables y que mujer cobertura a muchas personas infectadas.
Las poblaciones en situación de mayor vulnerabilidad y desfavorecidas (personas migradas, muchas de ellas en situación administrativa irregular -sin papeles-; trabajadores/se sexuales; personas usuarias de drogas inyectables; hombres que tienen sexo con hombres; mujeres, jóvenes…) que, en la actualidad, son atendidas por la red de entidades, tendrán graves dificultades para acceder a un sistema sanitario formal, tal como se ha demostrado durante este 30 años de atención de las entidades especializadas.
Como conclusión y según Barberà, Carrera y Pineda, en este encuentro masiva con los medios, la calidad de vida de las personas infectadas por el VIH empeorará notablemente y esto no tiene marcha atrás.
