El fotógrafo brasileño Marcos Costa muestra en Vilafranca del Penedès esta colección de fotografías
Son mujeres que no ocupan cargos políticos, ni cargos de poder. Ninguna de ellas pertenece a las clases más privilegiadas del país. Los prejuicios y la discriminación raciales aún encuentran subterfugios para perpetuarse en un país donde el mestizaje y la simbiosis entre razas es un hecho habitual.
Esta muestra fotográfica quiere registrar algunos rostros de mujeres negras brasileñas de ahora, de este nuevo milenio. Son mujeres negras con edades que van de los once a los sesenta y tres años. Niñas, adolescentes, jóvenes, madres y abuelas. Imágenes que revelan la belleza, la simplicidad, la veracidad y la sutilidad y que llevan insertadas una infinidad de dimensiones expresivas y simbólicas, esenciales para la construcción de la autoestima y la autoimagen, es decir, de la identidad de estas mujeres.
Estas mujeres negras forman una gran parte de la población y merecen su lugar histórico, porque viven y contribuyen al desarrollo de sus ciudades y de su país.
Dado que la discriminación de la que son víctimas las mujeres negras brasileñas tiene a la imagen fotográfica, o su ausencia, uno de los pilares de los prejuicios, el objetivo principal de esta muestra es utilizar la fotografía de forma inversa, valorizando y evidenciando, de una forma histórica, social y estética, la mujer negra.
La exposición pretende, también, descifrar la belleza que hay en cada una de ellas, sin seguir los patrones dictados por la mirada eurocéntrica, invirtiendo el paradigma estético que han sufrido hasta ahora, y aún sufren, las mujeres negras de Brasil: por un lado, el desprecio histórico de su belleza en el propio país, y por otra, la belleza tópica de la mujer negra, o mulata, asociada a fenómenos y a tópicos como el carnaval, la fiesta y la exuberancia, fácil y de consumo turístico . Así, se pretenden enriquecer las referencias estéticas que llegan de Brasil.
Las mujeres negras brasileñas, una belleza robada?
Descodificando las informaciones contenidas en muchas fotografías recientes (dentro del contexto de Brasil), es decir, yendo más allá de la pura imagen, nos depravamos con la lógica del consumo, que viene dictada por la industria de la belleza. Pero también nos encontramos con otra cuestión más delicada, que es el “blanqueamiento” del país y la “desafricanització” de la cultura brasileña, o, como mínimo, la negación de su parcela negra, que siempre ha sido, y sigue siendo, ignorada.
Lejos de naturalizar la relación “belleza / fealdad”, se pretende señalar como el no seguimiento de un patrón estético, de una moda, hace que, en este caso las mujeres negras brasileñas, sean objeto de una forma de exclusión y del intento de imponer “exhaustivas prácticas de blanqueamiento de su apariencia”.
El proceso de construcción de la imagen de la mujer negra en Brasil, con la realidad histórica de la esclavitud siempre en el trasfondo, fue siguiendo una “jerarquía de poder naturalizada” según la apariencia, una jerarquía que todavía hoy insiste en continuar en la sociedad brasileña, donde el blanco está en el escalón más alto y el negro al más bajo.
La imagen de los y de las negras que se fue formando históricamente mediante los estereotipos aún se encuentra dentro de la mentalidad de la población brasileña, y continúa reduciendo de forma drástica la identidad, la individualidad y la autoimagen de cada persona afrodescendiente.
Nacido en Londrina, estado de Paraná, Marcos Antonio da Costa es Licenciado en Artes Escénicas, Universidade Estadual de Londrina (UEL). Del 2000 hasta el 2010 ha realizado diversos cursos, seminarios y jornadas sobre cine, vídeo y fotografía, siempre en relación a su formación universitaria y la actividad profesional que ha venido desarrollando.
De 2002 a 2010 realizó y produjo un total de 10 espectáculos, y recibió dos premios del Ministerio de Cultura de Brasil para la realización de: “Anastasia” y “Congada de Chico Rey”.
Su experiencia en el mundo teatral recorre diversos ámbitos, desde la autoría de textos, hasta la realización, producción y dirección de los mismos, así como el trabajo escenográfico y de producción visual en general de los actores y actrices.
Todo su trabajo teatral está directamente relacionado con la reivindicación y valorización de la herencia cultural afrobrasileña.
La mostra se puede visitar a partir del viernes 27 de enero hasta el 17 de febrero en la Sala dPas de l’Escorxador (c. de l’Escorxador), 19-21. 08720 Vilafranca del Penedès).
Todas las fotografias corresponden a mujeres de la ciudad de Londrina, estado de Paranà, región sud del Brasil.
