Más allá de las cábalas electoreras, todo parece indicar que el número de votantes residentes en el extranjero aumentará en las próximas Elecciones Generales, gracias a la Ley de Memoria Histórica.
Está ley aprobada por el Congreso de los Diputados el 31.10. 2007, y publicada en el BOE el 31 de diciembre del mismo año, reconoció derechos en favor de quienes padecieron persecución o violencia durante la Guerra Civil, incluyendo el reconocimiento a las víctimas que emigraron por la dictadura de optar a la nacionalidad española. Aquellas personas cuyo padre o madre hubiera sido originariamente español tendrían derecho a obtenerla, derecho que también ostentarían los nietos y nietas de quienes tuvieron que renunciar a la nacionalidad como consecuencia del exilio.
Esta Ley “sui generis” por su sentido especial y particular, va más allá respecto del concepto de trasmisión de la nacionalidad de las mujeres a su descendència hasta la Constitución de 1978, sus modos de trasmisión generacional, allende las fronteras, tiene carácter extraterritorial. Su validez con efectos legales de ámbito temporal, tenía vigencia por dos años, hasta el 27 de diciembre del 2010. La Ley contemplaba además, la posibilidad de ser prorrogada por un año más, plazo que se amplió el 22 de enero del 2010, hasta el 27 de diciembre del 2011.
La recuperación de la nacionalidad española ha dado la posibilidad, a aquellas y aquellos que la obtuvieron tras la ley, de votar por primera vez, ejerciendo el derecho constitucional contemplado en el Art. 32 que puntualiza que “solamente los españoles serán titulares de los derechos reconocidos, salvo lo que atendiendo a criterios de reciprocidad pueda establecerse por tratado o Ley para el derecho activo y pasivo en las elecciones”.
Con papeleta y pasaporte en mano las personas que obtuvieron la nacionalidad ejercerán su derecho a elegir votando en 183 países donde tiene presencia el Estado español. La comunidad residente en el exterior en edad para votar, tienen de plazo hasta el sábado para hacerlo personalmente en consulados y embajadas.
Así las cosas, en medio de la crisis económica que no cesa, y con unas tasas de desempleo que se asoman al abismo i sumándole la crisis de confianza en los políticos, el escenario electoral muestra que las personas de nacionalidad española residentes en el exterior, contribuirán con su voto este 20-N en las Elecciones Generales, con un abanico de candidatos de diferentes partidos y coaliciones, donde se elegirán a 350 diputads y diputados, a 208 senadores y senadoras y al próximo Presidente de Gobierno, entre los que se encuentran los más opcionados Alfredo Pérez Rubalcaba del PSOE, Mariano Rajoy del PP y la única mujer candidata a la presidencia de un partido con posibilidad de escaños, Rosa Diez de Unión Progreso y Democracia (UPyD).
