El recuperado espacio industrial ComaCros de Salt, Girona, será el escenari de unos seminarios para incorporar al curriculum educativo la expresión artística para la inclusión social i la convivencia comunitaria.
Lucina Jiménez, directora de ConArte en el Núria
El seminari internacional, que se inicia este jueves en Salt, será una ‘formación de formadores’ que prevé multiplicarse más adelante entre el profesorado de enseñanza primaria, secundaria y en escuelas de arte. De esta manera, se pretenden socializar las experiencias positivas y las metodologías adoptadas des de 2010 a 29 colonias de las zonas periféricas de Ciudad Juárez -tristemente conocida por los altos índices de feminicidios- que allá les ayudaron a prevenir las violencias sociales desde las artes i la cultura de la paz.
Aquí el objetivo es, según la organización “brindar herramientas de comprensión y actuación directamente vinculadas a las artes y al patrimonio cultural para fomentar el aprendizaje, la convivencia comunitaria y la inclusión social en procesos educativos que trabajan en contextos de diversidad cultural”. Esta actividad está impulsada por la alianza entre la asociación civil mexicana ConArte ConArte (Consorcio Internacional Arte y Escuela), la Càtedra Unesco de Políticas Culturales y Cooperación de Girona y el Festival de Torroella de Montgrí, además de algunas personalidades del mundo cultural como el coreógrafo Cesc Gelabert.
Creación de vínculos afectivos
Según Lucina Jiménez, la directora de ConArte -que ja había firmao un Convenio con la Universidad de Girona desde 2006, cuando nació la organitzación en la capital mexicana- allí se trataba de “aprender con la danza, para vincular el espacio educativo con la cultura y crear un vínculo afectivo en las escuelas públicas más pobres de la capital mexicana”. Querían ser como un “foco rojo para la prevención social” decía Jiménez y por ello su asociación nació en los barrios más conflictivos de la zona centro del Distrito Federal, que registra las más altas cifras de violencia y exclusión social (Tepito, Mixcalco, La Merced…).
Ahora, ConArte ya trabaja a las periferias de diversas capitales federales de los estados mexicanos como Tapachula (Chiapas), Monterrey (Nuevo León) y también otras ‘ciudades frontera’ como Nogales (Sonora). Y en este 2014 ya estarán implantados, además de Guadalajara, en Zapopán y Tonalá (Jalisco), por donde pasa el tren que se conoce con el nombre de La Bestia: el convoy de mercancías que atraviesa el país y cuyo recorrido aprovechan los migrantes centroamericanos para llegar a los Estados Unidos, muchas veces con riesgo de las propias vidas.
Gemma Carbó y Montse Faura
Descodificar les canciones populares
La metodología actual es en estos momentos más amplia y abarca otros aspectos: además de la danza, han incorporado el canto, escenifican obras de dramaturgia y teatro y también organizan núcles de ensembles musicales. “Se trata de incorporar la diversidad, la equidad de género y la cultura de la paz” y eso lo hacen, a veces, “descodificando las canciones populares mexicanas como Bésame mucho de Consolito Velásquez para desmentir que el amor y el despecho no ha de ser contra las mujeres; o también utilizan algunas letras de canciones de Pedro Infante, nacido en la ciudad costera de Veracruz, en el golfo de México, para explicar la perspectiva de género y la biodiversidad.
Programa piloto listo en septiembre
Gemma Carbó, la coordinadora de la Cátedra Unesco de Políticas Culturales y Cooperación y también directora de ConArte Internacional explicaba que tienen el apoyo de los Festivales de música clásica de la zona y que a partir de septiembre ya tendrán un programa piloto para poder desarrollarlo en los diferentes projectes que puedan ir saliendo. Porque “de lo que se trata, decía Carbó, “es incorporar una enseñanza más holística en la educación y que pueda tener impacto social en Salt y en l’Estartit”.
Montse Faura, la directora del Festival de Torroella de Montgrí, organización que les da apoyo, ampliaba que ya trebajan en Torroella y l’Estartit con la música clásica, que es una manera lúdica de educar. En estos dos municipios de Girona ya se ha puesto en marxa en la Escuela Portitxol l’Orquesta Ukelele, en la que participan niñas y niños.
El coreógrafo Cesc Gelabert será uno de los soportes artísticos, entre otros participantes, en los diferentes proyectes de las escuelas e institutos. El piensa trabajar con la infancia “el movimiento y la danza porque el arte es un alimento de la vida”. En este sentido, explicaba que las personas mayores que ya no tienen movilidad es porque no les enseñan a mantenerse activos y a moverse y sólo los atiborran a pastillas cuando tiene algún dolor. “La memoria decía, está vinculada con los espacios personales y creativos y, si no existe movimiento, no puede haber memoria”.
En encuentro con la prensa de las distintas instituciones vinculadas a ConArte tuvo lugar en el remodelado espacio Núria de la Rambla de Barcelona el dia 1 d’abril.
