Carme Portacelli, directora de teatro y Premi Max al mejor autor-autora teatral en catalán por Fairy (2008), ha protagonizado la 4ª Tertulia Salambó, organizada por el Observatori Cultural de Gènere. Han presentado a Portacelli, Mª Àngels Cabré y Marta Figueras, delegada en Catalunya de la Asociación de Mujeres Cineastas y Medios Audiovisuales (CIMA).
Con más de treinta asistentes, la Tertulia se ha desarrollado en un ambiente distendido y cómplice. Portaceli ha recordado tópicos como que su madre le decía que la mujer se realiza casándose y teniendo hijos, aunque, contradiciéndose la envió a Londres. Portaceli, con 56 espectáculos a sus espaldas, se reivindica como una mujer luchadora que no le debe nada a nadie. De sus experiencias viajeras destaca la grata experiencia que tuvo en Berlín donde, en el campo artístico, hay una gran capacidad y libertad de riesgo y las y los artistas están reconocidos y remunerados por el Estado. En cambio su experiencia en Caracas no fue muy buena dado el constante sentimiento de peligro y falta de libertad que se respiraba. “No se podía ir sola por la calle”, recuerda.
Ve también diferencias importantes entre Barcelona y Madrid. Mientras que Barcelona es muy misógina, ocurre lo contrario en Madrid. Explicó que presentó un proyecto teatral en Madrid en el que quedó entre los tres finalistas. Les dieron seis meses para preparar y desarrollar el proyecto y defenderlo ante un jurado de profesionales en la materia. No ocurrió lo mismo en Barcelona donde, habiendo quedado también entre los finalistas, les dieron, 15 días para la preparación y desarrollo. Después les dieron 15 días más, y en el jurado faltaban profesionales del campo del teatro. “La sensación fue de de poca seriedad”, dice.
Portacelli nos dice: “He luchado muchísimo ya que la mujer ha de demostrar mucho más que un hombre, pero con mucho trabajo, paciencia y perseverancia he salido adelante. Es mucha la pasión que siento por mi trabajo”.
Hizo patente lo que no se puede ocultar, que desde que el PP ganó las elecciones, encabezados por Gallardón, las mujeres están perdiendo derechos a pasos agigantados: Cambios en la ley de custodia de los hijos o cambios a peor en la ley de el aborto. En cuanto a Cataluña “El presidente Mas lo primero que hizo fue recortar en el Departamento de Interior, Mossos d’Esquadra, el servicio de acogida de mujeres víctimas de violencia machista. Ya volvemos a tener miedo de denunciar. Por otra parte, no sabemos porque en Cataluña no se dispone de una ley de paridad. Se percibe cada vez más una falta de estima hacia las mujeres “.
Intervenieron varias asistentes exponiendo diversos puntos de vista: la diferencia de los sistemas educativos entre Finlandia y el Estado español, la forma diferente en que las madres continúan educando a sus hijos si son chicos o chicas, cómo los adolescentes creen que es el amor tomando como patrones la pornografía que consumen, el poco o mínimo esfuerzo de las mujeres jóvenes en la defensa de unos derechos que se ganaron con terribles esfuerzos y que ahora vemos que están desapareciendo a gran velocidad, los parabenes, compuesto químico que se encuentra en productos cosméticos y se usa como aditivo alimentario….
Carmen Portaceli finalizó diciendo: “La guerra está abierta, estamos retrocediendo muchísimo. Parece mentira que aún tengamos que luchar por nuestros derechos en el siglo XXI”.