Más de dos mil mujeres se manifestaron por las calles de Barcelona el pasado 25 de Noviembre, Día Internacional contra la Violencia a las Mujeres.
Durante el transcurso – donde se coreaban constantemente, diferentes lemas y consignas, todas ellas contra la violencia machista – se podía percibir el enojo y la frustración de muchas participantes ante las 96 mujeres asesinadas por la violencia machista este año 2016, en el estado español, según feminicidio.net. Condenaron la falta de protección del Estado, al no poner los medios necesarios para evitar estas muertes.
Desde hace 30 años, cada 25N en Barcelona se han convocado, desde el Movimiento Feminista, acciones de protesta contra la violencia, la discriminación, la desigualdad, culminando en la manifestación de todas, el día 25N, y con un objetivo común, conseguir principalmente de que se acabe la lacra de la violencia machista y que las mujeres vivan en plena libertad, siendo propietarias de su vida, de su cuerpo y de todas sus decisiones.
Las cifras que siempre estudian los barómetros oficiales, no son las reales, según mujeres de organizaciones activas en la lucha por los derechos humanos de mujeres y niñas, “el no denunciar el número real de asesinatos con la intención de no crear alarma social, es contraproducente, ya que la alarma sería un índice necesario para concienciar a la ciudadanía, a comprometerse para la eliminación de la violencia. En estos últimos ocho años, la cifra de asesinados por el terrorismo machista, es de más de novecientas mujeres.
La Manifestación salió de Canaletas hasta la Plaza Sant Jaume, donde mujeres de diferentes colectivos participantes en la organización de los actos del 25N, leyeron el Manifiesto elaborado conjuntamente por todas.
Marisa Fernández, ex-presidenta de la Asociación de Mujeres Juristas, hizo hincapié en la precariedad en que se encuentran las mujeres agredidas en cuanto a la asistencia y defensa, por parte de la jurisprudencia, interpelando a jueces magistradas y magistrados:
“Disculpen señorías, nos están asesinando, les recuerdo señorías, que seguimos estando a la cola en las normas de protección concedidas a las mujeres. Mientras la media estatal es de un 57%, en Cataluña es de un 37%, habiéndose dado un 27% de recortes “…” Disculpen señorías, nos están asesinando. Tienen noción, que al funcionariado le falta formación para atender a mujeres agredidas? exigimos formación obligatoria y permanente para todo el funcionariado, y también exigimos que se creen unidades de valoración integral, como establece la ley “.
Otro de los colectivos que participaron en los discursos fue el de “las Kelly”, mujeres del sector de la limpieza, un sector mayoritario de mujeres y con una precariedad extrema. En este sector las mujeres se están organizando y denunciando las condiciones en que trabajan. Leyeron un comunicado elaborado por el colectivo: “Estamos en diferentes territorios del Estado, entre ellos, Barcelona. Hoy condenamos las violencias machistas, que son muchas, la más grave, el asesinato” … “Nuestro trabajo es duro, mal pagado y muy precario. Tiene un gran impacto en nuestra salud, que por norma general, no es atendido ni reconocido. Denunciamos nuestras condiciones de trabajo y exigimos que estas mejoren “.
Reivindicaron ser algo más que madres y esposas, “somos también trabajadoras y nuestro sueldos deben corresponder a nuestro trabajo y que no se devalúa por ser mujeres”. Consideran que la dependencia económica obligada es violencia machista que condena a las mujeres a renunciar a su individualidad.
Mujeres Colombianas, participantes en la mesa del Proceso de Paz en Colombia, fueron nombrando en voz alta, algunos de los 32.125 nombres de mujeres colombianas, pertenecientes a los casos de violencia registrados del 2015 al 2016. “Vivas nos queremos, para vivir una vida digna”, gritaban fuerte.