Joana Gallego.
Día a día, Joana Gallego, experta en género y comunicación, revisa la prensa nacional y estatal y encuentra, uno tras otro, ejemplos de comunicación sexista.
En los últimos años ha crecido la presencia de mujeres en las redacciones, pero allí la visión de género aún es miope.
Pese a los datos que aporta en cada intervención pública que hace, y a las publicaciones de sus libros, parecería que el mensaje no termina de llegar a quienes titulan y escriben en los diarios. En la Master Class que ofreció esta semana en el Colegio de Periodistas de Cataluña, Joana Gallego mostró ejemplos de hace pocos días.
A la Master Class titulada “Él hace. Ella es”, donde Gallego buscó explicar “por qué se producen y cómo se pueden evitar las asimetrías de género en la información”, asistió una quincena de personas, la mayoría bastante joven (y alguna no dejaba de estar muy atenta a su facebook). Era un número relativamente habitual en los cursos que ofrece el CPC a gente afiliada o interesada en la temática, la diferencia es que esta charla era gratuita.
La visión de género en la comunicación está entre los temas que “no son importantes, sino interesantes”, dijo Gallego haciendo un giño irónico a la relevancia que se le da en la mayoría de los medios y por parte de las personas profesionales el ramo.
Carles Singla, presidente del CPC, explicó que el punto de partida de la charla es el último libro publicado por Gallego: “De reinas a ciudadanas. Medios de comunicación, ¿motor o rémora para la igualdad?” y dijo el curso tenía mucha orientación práctica y de utilidad para la profesión. Así fue, con una presentación de ejemplos muy amplia.
Titulares de varias publicaciones de medios estatales.
Visión de género masculina
En los últimos 15 años el incremento de mujeres en las redacciones de medios se ha incrementado, actualmente llega a un promedio del 38%, así como su participación en los altos cargos, menos del 20%; sin embargo, los contenidos no cambian significativamente.
En la educación básica y secundaria, por ejemplo, dice Gallego, es abundante la presencia de mujeres en el profesorado y tampoco se refleja en la educación una visión de género. “No pueden cambiar contenidos, ni sesgos tradicionales, se incorporan a un sistema con rutinas y maneras de ser ya establecidos”.
En el caso del periodismo, está la creencia de que parte de la “objetividad” e “independencia” profesional es no posicionarse con ningún género. “Es una trampa”, dice Gallego, ya que en realidad se forma parte de una perspectiva de género masculina.
Primeras, la excepción habitual
El reciente nombramiento, hace una semana, de Ana María Ferrer como magistrada de la Sala Penal del Tribunal Supremo es uno de los ejemplos presentados. Gran parte de los medios destacó en titulares que se trata de la “primera mujer” en llegar a ese cargo, antes que del nombramiento de la persona en sí.
Gallego plantea que, a estas alturas, ya no es noticia que se nombre a una mujer en un cargo y que el hecho de destacar como “primera vez” ya se ha convertido en algo habitual. Hábito que lo que hace es reforzar la excepción. No es que no se deba mencionar el hecho de ser primera vez, pero no es adecuado destacar ese aspecto en el titular ni hacer que se sea el enfoque de la noticia, ya que va en desmedro de la persona, la mujer y sus méritos, que logró ese cargo.
Cuando un hombre es nombrado en un cargo o realiza alguna acción y se publica en los medios, señala Gallego, ningún otro se siente representado porque se muestra esa acción o nombramiento como algo individual, se destaca a esa persona. En el caso de una mujer ocurre que todas están representadas porque lo que se destaca es el género, además como excepción a la regla.
Princesas y divas
También es habitual el uso de “metáforas fosilizadas” para referirse a una mujer que hace noticia, calificándola como “reina”, “princesa” o “sirena”, entre otras. Calificativos que suelen utilizarse en lugar del nombre de la persona que es objeto de la noticia.
Por otra parte, mientras que a un hombre se le suele destacar sus virtudes, en el caso de deportes especialmente, o sus acciones; con las mujeres ocurre que se le observa como objeto, por lo que es, cómo es, atributos y qué representa, una diva, no lo que hace.
Joana Gallego ha publicado: De reinas a ciudadanas. Medios de comunicación ¿motor o rémora para la igualdad?, Aresta 2013; Putas de película. Cien años de prostitución en el cine (2012); Eva devuelve la costilla (2010); Si te vas te mato. Mujeres que murieron por su libertad (2009 – escrito conjuntamente con alumnas y alumnos), entre otros.
Más información:
CPC
Joana Gallego
Joana Gallego: La dona encara és una cosa, sense nom, per als mitjans
