Bajo un sol primaveral ha finalizado en Segovia el VII Encuentro de mujeres que transforman en mundo. Ha sido más de una semana de actividades, aunque los tres días que han concentrado los temas más candentes han sido del 17 al 19 de marzo.
Más de una treintena de invitadas de diferentes lugares de España y de otros continentes han debatido sobre los diversos aspectos de la lucha de las mujeres en todo el mundo. Un público numeroso y entregado ha seguido con entusiasmo las diferentes sesiones.
El tiro de salida fue el debate titulado ¿Blancanieves ha muerto? sobre el tratamiento que los medios de comunicación dan a las mujeres. El diálogo fue retransmitido en directo por Radio 5 en su programa “Tolerancia Cero” moderado por su directora, Marta Gómez Casas. Pilar Aguilar, Asunción Bernárdez, Ana Requena y la autora de estas líneas debatieron por espacio de una hora de emisión, y otra más con los presentes en la sala, sobre la manera de superar la estereotipada imagen que los medios siguen presentando de las mujeres, pese al cambio evidente producido entre la población femenina.
El impresionante testimonio de Claudia Hernández, activista de la Fundación Supervivientes (FS) de Guatemala, ocupó la mañana del sábado. Entrevistada por Ana Pardo de Vera, ofreció un conmovedor relato de cómo una niña sometida a abusos sexuales durante varios años de su infancia pudo superar el trauma, convertirse en una luchadora por los derechos de las mujeres y construir un proyecto de vida. Claudia Hernández ha continuado el trabajo iniciado por su madre Norma Cruz, que decidió llevar a los tribunales a su pareja, un dirigente de un conocido grupo político guatemalteco, cuando supo que éste abusaba de su hija.
No menos valiente fue el testimonio de Luz Marina Bernal, en diálogo con Alicia Gómez Montano, una madre de uno de los 19 jóvenes asesinados en Soacha (Colombia) haciéndolos pasar por guerrilleros muertos en el marco del conflicto armado que ha vivido el país durante tanto tiempo. Pese a que el hijo de Luz Marina Bernal tenía una discapacidad intelectual, el fiscal sostuvo que era el líder de un grupo de narcoterroristas. Esa misma tarde le fue entregado el II Premio Mujer y Tecnología-Fundación Orange a la profesora de la UPC, Núria Salán, científica y actual presidenta de la Societat Catalana de Tecnología.
Rosa María Calaf habló durante una hora con Theresa Kachindamoto, jefa de una tribu de Dezda, uno de los 27 distritos de Malaui, una de las pocas mujeres a la que los jefes tribales reconocen autoridad y que ella aprovecha para criticar e impedir las diversas prácticas que se siguen manteniendo en el país, como son los matrimonios concertados de niñas a partir de los 9 ó 10 años, y los ritos de iniciación sexual a los que son sometidas muchas niñas y jóvenes como parte de una tradición ancestral que considera que las jóvenes tienen que “limpiarse” para impedir catástrofes o maldiciones en sus familias. Theresa Kachindamoto aboga por la educación de las niñas, y en estos últimos años ha impedido o anulado más de 1000 matrimonios concertados con niñas o jóvenes menores de 18 años.
Y para acabar, el domingo por la mañana Pilar Requena, periodista de TVE, entrevistó a la Premio Nobel de la Paz, Leymah Gbowee, una activista responsable del movimiento pacífico de mujeres que logró poner fin a la segunda guerra civil de Liberia, y por la tarde Leila Nachawati dialogó con la activista australiana afincada en Grecia, Melinda MacRostie, que lucha para mejorar la situación de los refugiados de la guerra que abarrotan desde 2015 la isla de Lesbos. Ambos testimonios conmovieron vivamente a los presentes, por la valentía y determinación que las dos mujeres han demostrado para enfrentarse a los problemas y las imaginativas iniciativas que impulsaron.
No todo fue debate y discusión, también hubo lugar para la diversión con la representación de la obra No hay papel a cargo de las actrices Ángeles Martín y Beatriz Bergamín, y la actuación del coro Entredós, que puso fin a los tres días de intenso y emotivo debate intelectual.
Alojadas en el hotel San Antonio del Real, un antiguo convento, las participantes en las actividades compartieron desayunos, comidas y cenas en una solidaria convivencia durante la cual han estrechado lazos de colaboración. Estos Encuentros de Mujeres que Transforman el Mundo se ha convertido en un acontecimiento anual y un referente para la bella ciudad de Segovia, que se sumerge durante una semana en un sifín de actos que se complementan con proyecciones de cine y exposiciones de fotografía o ilustración. Una impresionante muestra de retratos titulada “Miradas paralelas. Irán España” ha adornado las desnudas paredes de La Cárcel, Centro Cultural actual donde han tenido lugar los Encuentros, edificio que aún conserva toda la fisonomía del centro penitenciario que fue hasta no hace mucho tiempo.
*Profesora de la UAB, experta en género y comunicación.