Occidente tuvo el foco mediático equivocado y no percibió las exigencias de las nuevas generaciones según la profesora Gema Martín Muñoz
Estados Unidos y ‘una Europa incapaz de crear una política propia y ser un contrapeso’, propiciaron un ‘foco mediático equivocado’ que primó ‘la guerra contra el terrorismo y el islamismo’ y no se dieron cuenta de las exigencias de una nueva generación de mujeres y hombres, educados y con diplomaturas, que generaron ‘dinámicos cambios sociales y económicos’ en el seno de las sociedades árabes, desde el Magreb hasta la península Arábiga y que ha concluido en un ‘proceso revolucionario regional’.
Esta fue una de las reflexiones de la profesora de Sociología del Mundo Árabe de UAM (Universidad Autónoma de Madrid) Gema Martín Muñoz, en su amplia, interesante y pedagógica clase magistral con la que obsequió a la asistencia de la Conferencia organizada por la Fundación Alfonso Comín el pasado 10 de mayo en Barcelona. Las revoluciones árabes. Factores comunes y particularidades nacionales era el título de la intensa y extensa charla, de la que aquí tomamos algunos aspectos, resumimos otros y anotamos sus publicaciones y otras sugerencias al final.
Según la profesora de la UAM, la Primavera Árabe, que se inició en diciembre de 2010 en Túnez es ‘un proceso regional de Revoluciones’ como lo fue el de la Europa del Este en la década de los noventa, porque ha sido una ruptura radical con el régimen anterior y porque tiene ‘factores o causas comunes’, que se suman a las ‘particularidades nacionales’. Hasta el momento, está dando un ‘mapeo diferente’ del Mediterráneo al Golfo Pérsico-Arábigo .
Gema Martín Muñoz considera Revoluciones triunfantes, las que echaron a sus tiranos: Zine El Abidine Ben Ali en Túnez (ya en fase de proceso Constituyente), Hosni Mubarak en Egipto (con dificultades, pero primera vuelta de elecciones presidenciales a finales de Mayo), Muamar El Gadafi en Libia (con situación excepcional por la intervención exterior y con elecciones anunciadas para Junio) y Ali Abdullah Saleh de Yemen (un proceso ‘a la española’ porque se mantiene en el poder una ‘estructura familiar’ decidida por el dictador).
En Bahrein hubo una ‘Revolución abortada’ por las tropas de Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, con el apoyo del Consejo de Cooperación del Golfo y ‘el silencio de la sociedad occidental’. Estados Unidos tiene allí anclada su Quinta Flota Naval. En Siria existe una Revolución inacabada y difícil, porque ‘no hay voluntad política internacional, pese a Rusia, y por miedo a la alternativa de un escenario complicado’, con Israel e Irán como contrapesos. Según Martín Muñoz los demás casos de cambios políticos son ‘procesos reformistas intensos con objeto de prevenir la Revolución’ como en Jordania y Marruecos, aunque éste último país es algo ‘paradigmático’ porque ‘no era tan totalitario y ya tenia pluripartidismo aunque con limitaciones’.
Estado patriarcal y protector en bancarrota
El fuego que prendió casi simultáneamente en Túnez, incendió Egipto y extendió las llamas por la región tiene causas concretas que arrancan de un ‘malestar general desde la década de los 70s, por elprofundo cisma entre los regímenes y sus sociedades’: el ‘Estado protector patrimonialista y patriarcal’ –que también se reproduce en el seno de la familia, pues la mujer y los jóvenes deben obediencia al padre abastecedor– ‘entra en bancarrota, por el fracaso de sus promesas de protección’.
Siguiendo el contexto histórico de la profesora ‘al derrumbe moral del panarabismo por la derrota contra Israel en 1967’ se sumaron diferentes crisis locales (del pan, del maíz…) pero es la eclosión de una enorme generación – el 60% de la población tiene ahora menos de 20 años- que no se identifica con el proceso político post-colonial, y a quienes sí les recaen los fracasos y los índices de desempleo, la que cambió la ecuación.
En ‘los 80s esos regímenes dejaron de ser Estados protectores por la aplicación de los Planes de Ajuste Estructural del Fondo Monetario Internacional (FMI) que dejó sin futuro a esas jóvenes generaciones’ y, precisamente por ello, los tiranos tuvieron que ‘aumentar los niveles de represión’ porque, ‘con el proceso de liberalización crecieron las exigencias sociales de derechos y libertades’, que no pudieron cumplirse.
Llega en los 90s la 1ª guerra del Golfo de George Bush padre contra Irak (por la invasión a Kuwait) que, según Gema Martín Muñoz, ‘rompe esa dinámica liberalizadora y pone fin real al mundo bipolar porque Estados Unidos ya es hegemónico en esa zona’. ‘La debilidad y vulnerabilidad de esos regímenes’, que precisan del apoyo de Washington, permitirá la ‘creación en la región del Golfo de una telaraña de bases’ (Arabia Saudí y Qatar, donde está el Comando Central Militar) y ‘una clientelización, cuyas líneas rojas las marcan Estados Unidos e Israel’. En esa fase ‘se incrementan las violaciones de los Derechos Humanos, las torturas y las desapariciones’, además de ‘la desposesión de los derechos políticos y económicos’. Y ‘Europa es incapaz de crear una política propia y un contrapeso’ y ‘sólo está presente económicamente’ en la región al asumir el apoyo monetario a los palestinos tras los Acuerdos de Oslo que, además, ‘legitiman una situación de facto’ a favor de Israel.
El 11S (septiembre de 2001) complicará mucho más la situación en la región, de acuerdo con la profesora, pues a algunos países les tocará hacer la ‘guerra sucia contra el terrorismo (cárceles secretas…) y supondrá más carta blanca en contra de los derechos humanos’. Y, aunque algunos países recibirán ayuda económica y militar, –el PIB anual crecía paralelamente a la corrupción- la población está cada vez mas pauperizada. Aumenta, por tanto, su desesperación, porque es incapaz de cambiar la situación y, además, se siente discriminada y humillada por el doble rasero de las políticas internacionales.
Mujeres con carrera profesional antes de casarse
En este marco, ‘el foco mediático’ atiende sólo a la ‘guerra contra el terrorismo y el islamismo’ y no se percata de los ‘importantes y dinámicos cambios de esas nuevas generaciones’ que tienen sobretodo ‘perfil urbano’ por vivir en las grandes ciudades, excepto en Marruecos donde está mas equilibrada la población urbana y rural. Una juventud que ‘ha tenido acceso a la educación y a la Universidad y que, a veces, es mayoritariamente femenina’.
El éxito de las mujeres supera al de los hombres porque ‘para ellas significa mucho mas: es una verdadera posibilidad de independencia y de cambio su status social’. Y ‘está ocurriendo en todos los países, con geometrías variables y no se libra ni Arabia Saudí’, subrayó Gema Martín Muñoz que, como ‘se lo permiten sus rentas petroleras, tiene dobles Universidades, duplicidad de Hospitales, de autobuses… por el ordenamiento categórico de separación de sexos’ que existe en aquella monarquía.
Y esa ‘generación urbana, educada y politizada es la que está minando la estructura patriarcal’ Hay dos razones fundamentales 1. Hay una ‘transición demográfica’ por el ‘éxito del control de la natalidad’: el boom demográfico de los 70s con 7/9 bebes por mujer se ha reducido a 2/3; en el Magreb el fenómeno va mas deprisa que en la región del Golfo. 2. Ha habido un ‘acceso intensivo de la mujer a la contracepción’, pero también se ha producido un ‘atraso en la edad del matrimonio: ellas prefieren primero terminar su carrera profesional y luego casarse’. Eso ha implicado una ‘ruptura del modelo tradicional familiar’ y ha provocado un incremento del modelo de familia nuclear conyugal’, que se está imponiendo en esas sociedades.
¿Cuál es el problema, según Gema Martín Muñoz? Pues que ‘los regímenes todavía no han asumido el cambio, ni legalizado la nueva situación de las mujeres’: los Códigos de Familia siguen siendo igual de patriarcales. Se está al inicio de un proceso, que quiere ‘los principios insoslayables inherentes a la democracia, con su ‘Estado de derecho, sus garantías, su laicidad ciudadana y sus sistemas económicos distributivos’… Y eso, subrayó, tomará su tiempo, como lo han necesitado las distintas transiciones en diferentes continentes.
Y aquí ‘debemos desprendernos del particular velo occidental’ que publica ‘informaciones sesgadas, inexactas e instrumentalizadas’ para poder enfocarnos en saber lo que realmente está pasando de verdad y borrar ‘las falacias y los estereotipos sobre el mundo árabe musulmán’.
Las elecciones argelinas son una operación de maquillaje
En el debate, La Independent preguntó donde deben situarse en este proceso de cambios las reformas en Argelia de 2011 y las elecciones legislativas de este 10 de mayo. Se nos respondió que ‘la Primera Revolución fue esa gran tragedia de Argelia de 1991, que la fracturó con el golpe de Estado militar, para no tener que respetar los resultados de las urnas’.
Según Martín Muñoz ‘la guerra sucia posterior ha destruido a la sociedad’ y ha generado ‘mas desaparecidos que el Chile de Pinochet …. y tuvo todo el apoyo de Occidente’.
Lo de ahora ‘es una operación de maquillaje’ que no producirá cambios. El régimen ‘necesita homologarse’ y la Alianza presidencial va a ganar afirmó y recordó que Argelia fue ‘antiprimaveras’ y ‘apoyó a Ben Alí y Muamar El Gadafi’. Argelia, finalizó, ‘está aislada y la sociedad está agotada por la violencia’.
Y, en efecto, el Frente de Liberación Nacional (FNL), el partido único que ha gobernado el país desde la Independencia, que acaba de cumplir ahora 50 años, ha conseguido 220 de los 462 escaños. La abstención media en el país fue del 57,1%, pero en Argel, la capital ,casi llegó al 70 (69,5%) y en la conflictiva región de la Cabilia superó el 80 (80,16%).
Publicaciones recientes de Gema Martín Muñoz:
Revoluciones, transiciones y reformas,
http://ethic.es/2012/02/
Patriarcado e Islam,
http://www.iemed.org/
Todas sus obras en: http://www.uam.es/
Películas que reflejan el cambio en las relaciones familiares y el nuevo rol de la mujer:
Egipto:
2010, El Cairo 678, de Mohamed Diab,
http://www.20minutos.es/cine/
2009, Mujeres de El Cairo de Yousry Nasrallah
http://www.20minutos.es/cine/
Tunez:
2010, Ni Alá ni amo, guión de Nadia el Fani
Diversos países:
2011, La fuente de las mujeres, de R. Mihaileanu