OPINIÓN
El pasado 25 de septiembre tuvo lugar la presentación del último libro Mujeres granadinas represaliadas, de la historiadora Antonina Rodrigo (nacida en febrero de 1935 en el barrio del Albaicín de Granada y residente en Barcelona desde 1970).
La presentación del libro, editado por “Publicaciones Diputación de Granada”, se llevó a cabo en la sala de la Biblioteca Arús de Barcelona, que estaba rebosante de público.
Antonina Rodrigo y Montse Fernandez-Garrido
La escritora habló durante dos horas, no sólo de este su último libro sino también de lo que ha escrito y publicado de su poeta favorito, Federico García Lorca y sobre la actriz catalana Margarita Xirgu. Sobre la mesa lucía un hermoso ramo de flores con los colores de la bandera republicana que le había regalado una amiga feminista.
Mujeres granadinas represaliadas: es un precioso libro de 342 páginas, con numerosas fotografías inéditas, en blanco y negro o color, donde la escritora cuenta una veintena de sobrecogedoras historias trágicas de nuestra historia reciente, tras haber llevado adelante durante años una profunda investigación, en bibliotecas, archivos, hemerotecas y mediante innumerables entrevistas personales con familiares de las mujeres enumeradas.
Vicenta Lorca, madre del poeta Federico García Lorca, Matilde Robles, madre de los hermanos Quero (famosos guerrilleros asesinados por los franquistas), que un día se enloqueció de pena, Agustina González López, la primera zapatera prodigiosa, Doña Paquita Casares, la maestra de Antonina, republicana y ejemplo anónimo de la educación libre y humanista auspiciada por la defenestrada República, Concha Moreno Grados y las hermanas Peinado “niñas del Carmen”, denunciadas y fusiladas, las milicianas, aunque la guerra era cosa de hombres, Nicolasa Ortega Hita, una maestra en la desbandada de Málaga, Matilde Cantos Fernández, la vieja socialista de pobreza limpia, Ángeles Fernández López, la pastelera del Albaicín, la pescadera Trinidad Capelli, fusilada y exterminada su familia, Doña Clotilde García Picossi, represión social en la realidad y la ficción lorquiana, Laura de los Ríos Giner, la niña que tocaba el piano a cuatro manos con el Maestro Manuel de Falla, Isabel García Lorca, la herida perdurable, Rosario Fregenal Piñar (Fregenala), la vecina rebelde de Manuel de Falla, Maruja Ruiz Martos, la líder de Motor Ibérica, Elvira Pérez Cáceres, la secretaria de Federica Montseny, Ministra de Sanidad y Asistencia Social, Purificación y Enriqueta Rivas Castro, maestras de Salar, acosadas por el terror falangista hasta el suicidio. Y María Garrido Martín, mi madre y la suya, Leonor Martín Pajares, represaliadas por ser hija y esposa de un guerrillero, Juan Garrido Donaire, alias Olla fría.
Antonina Rodrigo nos enseña la Granada que “ se mostró con perfil pusilánime al acabar la guerra civil en 1.939, acobardado y rendido a los sublevados, desde el primer momento, salvo muchas excepciones en el ejemplo de hombres y mujeres que lucharon en la guerra y en la posguerra por defender sus convicciones”. Su libro “pretende recuperar y retener la memoria histórica de esa lucha feminista en la adversidad a través de mujeres muy distintas” …
Un libro imprescindible (y con un precio muy asequible, 15 €) para conocer un poco mejor la historia de una ciudad, que, junto con Zaragoza, fue de las más cruelmente castigadas por el franquismo. Un libro de mujeres, para mujeres y hombres que quieren conocer nuestro pasado reciente, de mano de unas de las más insignes investigadoras españolas.
Antonina Rodrigo cuenta con numerosos reconocimientos: Entre otros, La Creu de Sant Jordi, la Medalla al Mérito de la Ciudad de Granada y la Medalla de Andalucía. Y el barrio del Albaycín cuenta con una placeta que lleva su nombre.