©2014 Leonor Sedó
«Para mí, los acontecimientos sociales son como una obra de teatro en la que existe un inicio, un nudo y un final, un punto culminante, y yo quiero captar ese momento».
La fotógrafa catalana Pilar Aymerich ha sido galardonada con el Premio Nacional de Fotografía 2021, dotado con 30.000 euros, por una trayectoria ‘a pie de calle’.
La fotógrafa documentó desde dentro las aspiraciones de cambio social, cultural y político que se dieron en Catalunya en el tardofranquismo y los primeros años de democracia. Ella fotografió todo el movimiento feminista de los años setenta.
Según el jurado: «Una trayectoria que plantea cuestiones acuciantes en la realidad social y política tardofranquista, que aún hoy son de relevancia».
«Germina desde una noción ética en la que la fragilidad es el punto de partida de una narración fotográfica», ha valorado el jurado.
«Pilar Aymerich incorpora a su propia praxis los planteamientos y reflexiones feministas, algo inusitado en el panorama de aquellos años en España. Desarrolla su propia militancia y fotografía desde dentro las principales acciones y demandas del movimiento (huelgas, concentraciones, manifestaciones, etc.)», han explicado desde el Ministerio de Cultura y Deporte.
«Sus imágenes suponen una deconstrucción radical de la práctica del fotorreporterismo moderno: primero se mezcla con el ambiente, entiende la situación y luego la fotografía. Pone así en práctica una ética en la que la fotografía se entiende como una práctica relacional e intersubjetiva en la que se trabaja con personas», indica la nota del jurado.
El jurado
El jurado, presidido por la directora general de Bellas Artes, María Dolores Jiménez-Blanco Carrillo de Albornoz, ha estado formado por: Ana Teresa Ortega Aznar, autora galardonada en 2020; María Rosón Villena, investigadora y docente del Departamento de Historia del Arte de la Universidad Complutense de Madrid; José Alberto Anaut González, presidente de PHotoEspaña y director de ‘La Fábrica’; Elvira Dyangani Ose, directora del Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (MACBA); Jorge Ribalta Delgado, artista, investigador, editor y comisario independiente; Rubén Hernández Bermúdez, fotógrafo y cineasta, y Mireia Sentís Casablancas, fotógrafa y escritora.
Pilar Aymerich
Pilar Aymerich i Puig (Barcelona, 1943), se formó como directora teatral y escenógrafa en la Escuela de Arte Dramático Adrià Gual en Barcelona y después en Londres, donde se introdujo en el campo de la fotografía, ampliando posteriormente sus conocimientos técnicos en los Estudios Raphael de París. Más tarde se especializó en la fotografía de reportaje y de retrato.
Comenzó su carrera de fotógrafa profesional en 1968 en Barcelona colaborando con la agencia CIS. Su trabajo gráfico ha sido publicado en Triunfo, Destino, Serra d’Or, la Calle, Cambio 16, El País, Fotogramas y Qué Leer.
Trabajó como ‘fotógrafa de calle’ y se la conoció más después de la muerte de Franco, en 1975, dada la visibilidad que adquieron los movimientos sociales que reivindicaban la democracia, la libertad y la igualdad, especialmente en las relaciones entre géneros, de los que ella formaba parte.
Su colaboración en varios libros entre los que se incluyen los dedicados a importantes mujeres catalanas como Montserrat Roig, Federica Montseny, Mercè Rodoreda, Caterina Albert o Maria Aurèlia Capmany, han supuesto diversas exposiciones dedicadas a ellas.
Desde 1974 ha colaborado en medios audiovisuales como TVE participando en numerosos programas. Ha enseñado fotografía y contribuido valiosamente con su trabajo en el Instituto de Estudios Fotográficos de Catalunya.
Actividades y premios
A finales del año 2004, realizó una exposición en el Museu d’Història de Catalunya sobre la transición española en Catalunya, titulada ‘Memòria d’un temps, 1975-1979’ (‘Memoria de un tiempo, 1975-1979’).
En 2018 su obra fue adquirida por el Museo Reina Sofía. Es miembro del Consejo Directivo de UPIFC (Unión de Profesionales de la Imagen y Fotografía de Catalunya) y miembro de la Junta de Gobierno del Colegio de Periodistas de Catalunya en los periodos 1997/2001 y 2001/2005.
En 2002 se le concedió el Premio del Instituto de Derechos Humanos: Mención Especial. Medios de Comunicación del XVI Premio Solidaridad, por la destacada actuación en defensa de los derechos fundamentales; en 2005 recibió la Creu de Sant Jordi, y también es poseedora del Premio de Comunicación no Sexista 2013 por su trayectoria profesional.
Aymerich y la fotografía
Pilar Aymerich, en un encuentro feminista realizado en el Café Salambó de Barcelona, recordó: «Cuando era una niña me decían que no hablaba y que sólo miraba; que era como una especie de mochuelo. Entonces decidí sacar partido al mochuelo y dedicarme a hacer fotografías.
Pero era una mujer. No tengo fuerza, no corro… En la transición, era peligroso disparar una cámara». Aymerich contó que uno de los recursos que utilizaba para pasar inadvertida en las manifestaciones era vestir con una falda tubular y llevar tacones.
«Cuando venían los ‘grises’, sacaba de mi bolso un espejo y un carmín y me pintaba los labios. Jamás recibí un golpe. La policía no pensaba que yo pudiera estar trabajando como reportera con aquella pinta», comentó divertida.
Para Pilar: “La fotografía es reflexión. Nunca he llevado motor en mis cámaras. No quiero ametrallar. Para mí, los acontecimientos sociales son como una obra de teatro en la que existe un inicio, un nudo y un final, un punto culminante, y yo quiero captar ese momento.
En la fotografía ‘Yo también soy adúltera’, conseguí capturarlo, y fue así porque yo me hallaba dentro del acontecimiento. De eso se trata”.
La fotógrafa, relacionada con el feminismo desde hace muchos años, es una mujer extraordinaria que tuvo la osadía de convertirse en reportera gráfica en un mundo de hombres.
