Las mujeres aumentan en los sectores de Alimentación, Ecoestética y Moda Sostenible. BioCultura tiene lugar en el Palau de Sant Jordi de Barcelona, del 9 al 12 de mayo.
BioCultura es ya la feria de productos ecológicos y consumo responsable más grande del estado. En esta edición, que comienza el jueves 9 de mayo, reúne a más de 700 expositores dedicados a los sectores de alimentación bio (con más de 15.000 referencias), cosmética ecológica, moda sostenible, casa sana, bienestar y salud, eco-estilo de vida, turismo responsable, artesanía y ONG. Paralelamente a la exposición tendrán lugar más de 400 actividades. En esta edición se espera superar los 70.000 visitantes.
En Cataluña el sector ‘bio’ no para de crecer. Y ello a pesar de los controles que se intentan imponer y que favorecen a los monopolios de alimentación. Según datos proporcionados por el sector, desde 1995 a 2018 la superficie certificada dedicada a producción ecológica se ha multiplicado por 42, y el número de operadores de productos ecológicos ha pasado de 236 a 3.859. Las ventas crecen año tras año.
Este crecimiento y éxito de público ha atraído a las grandes multinacionales, que están empezando a crear productos para lo que ellas consideran un nuevo ‘nicho de mercado’. Por este motivo, para que tanto las empresas clásicas del sector, como las nuevas iniciativas puedan sobrevivir en este escenario, se deben dotar de nuevas herramientas y estrategias, como la asociación entre las iniciativas más pequeñas y tradicionales, ser competitivas en aquello que las hace diferentes, conseguir ser muy creativas y dinámicas, crear sinergias entre ellas y conocer bien las tendencias del mercado. A ello ayuda BioBultura. En esta 29a. edición tiene un papel primordial INTERECO. Ángeles Parra, directora de BioCultura BCN y responsable de la programación de actividades en la feria, señala: “Es fundamental esta actividad que pone en una misma mesa a compradores y vendedores del sector bio”. [+info]
Hay que favorecer el crecimiento del sector alimentario ‘bio’
El presidente del Consell Catalá de la Producció Agrària Ecològica (CCPAE), Daniel Valls, que ha presentado el detalle de los datos a los medios, en la rueda de prensa, ha destacado que “en estos 25 años la producción ‘bio’ ha pasado de ser testimonial a convertirse en un sector clave en Cataluña. Todo el mundo mira el sector ecológico para evolucionar, para introducir nuevos productos, sanos, de calidad, y respetuosos con el medio ambiente”. Los datos y resultados del CCPAE 2018 también confirman esta tendencia positiva, con un crecimiento de un 20% de las facturaciones de productos agrarios ecológicos en 2017 (último ejercicio económico contabilizado), respecto al año anterior, llegando a los 584 millones d’euros”.
“Los datos del CCPAE son una gran noticia -continúa Ángeles Parra – aunque en el sector no todo son ‘rosas’. En este momento, se está dando la democratización del sector, pero mientras el sector agroalimentario está estancado, el sector orgánico es más dinámico, más creativo y también es el que cuenta con gente más joven. Sus mejores armas son la innovación y la diferencia. Precisamente las grandes marcas vienen a BioCultura a copiar a todos estos jóvenes artistas de la alimentación”, comenta Parra”.
La cosmética más allá de la belleza
BioCultura es una oportunidad par poder conocer de primera mano una muestra importante de la cosmética certificada que hay disponible en nuestro país. Durante los cuatro dias que dura la feria los profesionales y consumidores que la visitan encuentran una variada oferta tanto de empresas expositoras como de actividades. Se pueden conocer las últimas novedades del sector, y asistir a las conferencies en salas y participar en las 35 demostraciones que se ofrecen en el Showroom Ecoestètica, espacio destinado a realizarlas. [ Mirar Actividades]
Habría que preguntarse porqué los productos de cosmética alternativa son mejores que los tradicionales. Victoria Sánchez i Fernando Saper fundaron la empresa Saper y exponen desde hace 7 años. Así lo esplican: “Porque los tradicionales llevan muy poco porcentaje de principio activo, y la cosmética natural es más saludable, entre otros motivos porque no contiene ftalatos, ni siliconas, ni parafinas y ni otros ingredientes derivados del petróleo. Además los conservantes autorizados en cosmética certificada no son disruptores endocrinos. Por otro lado en la cosmética certificada natural, se pueden utilizar ingredientes naturales refinados que están bueno, porque no llevan tóxicos, y los ‘ingredientes ecológicos son mejores porque evitan el consumo de pesticidas en su generación. Y además garantiza que son de primera presión, por lo cual mantienen todas sus propiedades intactas (vitaminas, poder antioxidante, etc”.
La importancia del Reciclatge
Parece ser que las mujeres también lideran el sector del cuidado del medio ambiente y el reciclaje y reutilización de productos. Para ellas, este siempre es un tema cotidiano, urgente y necesario. Si hacemos referència a los residuos se ha de destacar una triple responsabilitat al respecto. En primer lugar -señalan-, las empresas que usan este exceso de plásticos desechables al mercado tienen que empezar a responsabilizarse del impacto de sus productos y buscar alternativas. Las administracionesque tienen que poner freno a esta generación indiscriminada de residuos y los consumidores y consumidoras que deben cambiar algunos hábitos para reducir los residuos que generan. Con este objetivo, Jenny Berengueras fundó Next Step, una empresa liderada por mujeres, en la que ella es co-fundadora, y es la primera vez que están en BioCultura. “A Next ofrecemos bolsas reutilizables para sustituir las plástico, que, además, contribuyen a la economia circular ya que son hechas con materiales reciclados”, comenta.
““Hasta ahora, explica Berengueras– muchos hemos confiado en el reciclaje como solución a la gestión de los residuos. Pero las recientes prohibiciones de países como China a aceptar los residuos de todo el mundo han dejado en evidencia la imposibilidad de gestionar el inmenso volumen de residuos que genera nuestra sociedad. Así pues, hemos de dar un paso más y reducir el consumo de plásticos- en especial los de un solo uso. Cada vez más personas apuestan por un estilo de vida que genere menos residuos, modificando sus hábitos de compra y consumo, como por ejemplo yendo a comprar con los envases propios, comprando a granel y productos no empaquetados o produciendo sus propios productos de limpieza o higiene” Según ella tenemos que seguir en esa dirección.
la moda sostenible y ética hace años que se encuentra a BioCultura, y está dirigida por empresarias innovadoras. Hay que destacar iniciativas locales exitosas como la empresa de Reus, Blaugap y la barcelonesa Algodón Roig, que celebran esta semana la Fashion RevolutionWeek, una cita anual e internacional que conmemora el derrumbamiento del Rana Plaza, el 24 de abril de 2013, una fábrica textil en Bangladesh en la cual perdieron la vida 1.138 trabajadoras de talleres subconttratadas por marcas como Mango i H&M.
El accidente puso el punto de mira en el sector textil, caracterizado por la explotación laboral y el uso abusivo de los recursos naturales. De hecho, la moda es la segunda industria más contaminante del planeta, sólo por detrás de la petrolera. Es por ello que, desde BioCultura, a través de Planeta Moda, se lucha por un cambio de paradigma que asegure el uso responsable del agua y las materias primas, la producción local y el respeto por los derechos humanos. Un tema del que poco o nada se está hablando en esta campaña electoral. Si los políticos ni siquiera lo llevan ahora a debate, ¿podemos esperar que tomen alguna medida a favor de un modelo más sostenible cuando estén en el poder?”, ser preguntan. “Desde la Asociación Vida Sana -afirman- hemos invitado siempre a las administraciones a ser partícipes del cambio. Pero estamos seguros de que todos los avances que se han logrado han sido gracias a la presión que ha ejercido la sociedad. Este año, volveremos a mostrar en la 26 edición de BioCultura Barcelona, que se celebra en el Palau Sant Jordi entre el 9 y el 12 de mayo, que otro mundo es posible “.
