Esther Vivas y Josep Maria Antentas, exponen en este libro, editado por Sequitur, como los últimos acontecimientos mundiales han llevado a una indignación no desesperada, no comparable con un golpe de ira frustrada sin perspectiva de salida, sino que se trata de una indignación esperanzada que empuja a la movilización y a las ganas de vencer, basada en la confianza colectiva en un nosotros – nosotras dispuesta en la construcción de otro futuro.
La Independent ha hablado con la coautora del libro Esther Vivas, activista y autora de un blog y de varios libros sobre movimientos sociales y consumo responsable.
En Planeta indignado. Ocupando el futuro, autora y autor afirman que la indignación expresada en las plazas de Tahrir, Syntagma, Zuccotti o en Cataluña no es “sólo cólera ante la injusticia, sino pasión constituyente, que va en sentido contrario a la atomización que nos impone el neoliberalismo”. Tienen claro que no se puede hacer una lectura despolitizada del movimiento y de estas luchas contemporáneas que se quede sólo en la dimensión moral de la indignación.
Podrías hacer una valoración breve del libro?
Con este libro queremos analizar las causas que generan la eclosión de este movimiento de la indignación colectiva: la situación de crisis social, económica y política que enfrentamos, quien pierde y quien gana con la crisis, etc. También analizamos los principales elementos que han caracterizado el movimiento del 15M, sus demandas, alternativas que se proponen, el papel de la juventud, las redes sociales, las intersecciones con el feminismo, el ecologismo y la lucha contra el pago de la deuda pública , la relación con los sindicatos, el significado de la ocupación del espacio público y las plazas. Hemos querido dar al libro, también, una perspectiva global, porque esta ola de indignación sólo se entiende desde una óptica internacionalista. Hemos visto como la revuelta se ha extendido desde la Primavera árabe, hasta los indignados y las indignadas de aquí, dando nuevo aire a las protestas en Grecia hasta el movimiento Occupy Wall Street en Estados Unidos. Y acabamos con las perspectivas de futuro, el retorno del anticapitalismo y de una estrategia de ruptura con el sistema que nos permita avanzar hacia otro futuro posible.
En referencia a este fututo posible, opinais, opinas que la indignación ha propiciado una rebelión política favorable a la justicia social, en el camino hacia una sociedad más igualitaria y democrática. Esta es la idea o conclusión más interesante que podemos extraer, en tu opinión?
Este nuevo ciclo de protesta, del que el 15M y el movimiento ‘occupier’ podríamos decir que tan sólo son el prólogo, dibuja un horizonte de ruptura con el sistema actual y pone, claramente, en evidencia los límites del sistema capitalista para satisfacer las necesidades de la mayor parte de la población a escala mundial y como su lógica depredadora, de búsqueda del máximo beneficio a toda costa, choca de lleno con los límites del planeta y del ecosistema. El nuevo ciclo indignado apunta a la urgencia de un cambio de modelo ante el precipicio al que nos conduce el capitalismo. Y la profundidad tan brutal de la crisis, que tiene un coste cada día más grande en la vida de las personas, empuja más gente en la calle, a la lucha, a la indignación ya la movilización. Y esta es la gran esperanza. La toma de conciencia de que somos muchos y muchas las que decimos “basta” ante un orden insostenible de cosas. Y que yo creo que sintetiza muy bien, y simbólicamente, este lema de Occupy Wall Street que dice: “somos el 99%”.
Planeta indignado. Ocupando el futuro
El libro está estructurado en 6 capítulos. Los cuatro primeros más generales tratan sobre: ??la crisis de la política, el papel de la socialdemocracia y los avatares del neoliberalsimo; la rebelión de indignadas e indignados y su protesta global con énfasis hacia políticos y banqueros, la juventud y que representan las herramientas 2.0, la dignidad de considerarse indignada o indignado; el internacionalismo de este movimiento y de su pensamiento.
Los capítulos V y VII tratan más específicamente la cuestión de la deuda y la crisis ecológica (la crisis alimentaria, la justicia climática, etc.)
Los movimiento de las feministas e indignadas conforma el capítulo VI de Planeta indignado: el trabajo que han desarrollado dentro de las plazas, en la primavera árabe; en el empleo en femenino de Vall Street, y el NO a la deuda de este movimiento de mujeres indignadas en Grecia.
El capítulo VIII y último es donde Esther Vivas y Josep Maria Antentas resumen sus conclusiones y apuestas de futuro: ¿Revolution Reloaded? … (Sin) Futuros posibles
