El pasado día 6 de junio, en la Casa del Libro del Passeig de Gràcia, de Barcelona, tuvo lugar la presentación del último libro “El grito y la mordaza: la desgracia de ser periodista” de la prestigiosa periodista y escritora Carmen Alcalde, que fué directora de la revista Vindicación Feminista (1976-1979).
En una sala con los presentes entregados, periodistas, economistas, abogados, y amistades diversas, se celebró un acto donde se dieron cita la inteligencia y la ternura.
Comenzó la presentación con el discurso del editor de Carena, el poeta José Membrive, que ya ha publicado cuatro libros de Carmen. Recordó la inteligencia, valentía, clarividencia, lucidez y entrega de la autora, recordando los cadáveres que ha dejado la transición entre quienes se dedican a escribir, personas abandonadas en la actualidad, entre las que se cuenta Carmen Alcalde.
Pilar Aymerich, Carmen Alcalde, Joana Martínez y Elvira Altés
Le siguió luego Joana Martínez, del Institut Catalá de les Dones, que mencionó el privilegio de presentar un libro de una autora como Carmen Alcalde. Recordó que el ICD ha hecho una campaña, llamada Veus de veus, para recobrar la voz de las mujeres silenciadas. Menciono los datos que facilitó la periodista Neus Tomás, de El Diario.es, manteniendo que en los medios de comunicación el 87% de éstos están dirigidos por hombres.
Habló después la prestigiosa periodista feminista y profesora universitaria, hoy jubilada, Elvira Altés, que desmenuzó con sabiduría el libro, leyendo algunos párrafos, y haciendo un repaso de la vida profesional de la autora, con 50 años de periodismo sus espaldas.
La siguió en los parlamentos la magnífica y premiada fotoperiodista Pilar Aymerich, que en los tres años que duró la publicación, fue colaboradora de Vindicación Feminista, la revista que dirigió Carmen Alcalde de 1.976 a 1.979, revista que a día de hoy mantiene su tienen vigencia, por lo acertado de los temas escogidos, la belleza y modernidad de su maquetación, recordando como ejemplos algunos artículos de dos concretas revistas, así como las excusas que tuvo que buscar la fotógrafa para plasmar en imágenes los temas que se publicaban: el reportaje sobre el Patronato de Protección de la Mujer, o de los robos de bebés en la Maternidad, que descubrió Carmen Alcalde, la primera de hablar de ello hace cuarenta años. Mencionó a las indomables que quedaron en la cuneta, como la propia Carmen, ya que en ella sumaba además el ser mujer y feminista, una periodista de género de la que nadie hablaba en la llamada Transición.
José Membrive, Anna Balletbó, Carmen Alcalde, Montse Fdez. Garrido y Julia López
Acabó el acto con la intervención de la autora. Carmen Alcalde, humilde como siempre, agradeció a todas y cada una de las personas que la han ayudado a publicar o que presentaban su libro. Y habló de la paz y la libertad. Y del amor , el respeto y la solidaridad entre personajes españoles y catalanes, autores de prestigio, que supieron ser cómplices en su labor en pro de la cultura, la paz y la libertad (Unamuno y Joan Maragall. Y Cervantes y Ramón Llull). Acabó exigiendo la libertad para los presos políticos catalanes.
En la mesa de centro, junto a un ejemplar de su libro, lucía un bouquet de flores, con los colores de la bandera republicana, que le regaló una amiga feminista.
