La diferencia salarial a favor de los hombres en relación a las mujeres en el ámbito directivo se mantiene en un 17% de promedio, pero lo más alarmante es la reducción de la presencia femenina en los puestos de dirección: desde 2008 la mujer pierde casi un 50% de su cuota de presencia en la dirección de la empresa.
La Unión Europea pretende que en 2015 las mujeres ocupen un 30% de puestos en los consejos de administración de las principales empresas europeas. Una meta que se antoja como imposible, teniendo en cuenta que la crisis económica está alejando a las mujeres de los cargos directivos, por lo menos en España.
Las mujeres somos el 50% de la población mundial, con cifras al alza, y controlamos el 80% de las decisiones de compra; un 60% de mujeres son licenciadas universitarias en Europa, pero el 97% de las grandes empresas europeas tienen a un hombre como presidente. En las empresas españolas del Bies 35 hay un 10% de mujeres en los consejos de administración, y en algunas no hay ninguna mujer.
Cifras que marcan la diferencia
Según el estudio que ha presentado este miércoles la Escuela de Negocios EADA, conjuntamente con la empresa de RR.HH. ICSA, la mujer pasa de ocupar casi el 20% de los cargos directivos en 2008 al 10,3% en 2013 (ver gráfico). El estudio se ha elaborado a través de una muestra de más de 80.000 personas empleadas por cuenta ajena en España.
Ernesto Poveda, presidente de ICSA Grupo y Director del informe, insiste en el tremendo error que supone “despreciar el talento que representa más de la mitad de la población. Es cierto que la crisis limita la capacidad de retribución de las empresas pero, en ningún caso debería significar una mayor desigualdad entre sexos”.
El autor del informe considera que “un entorno como el actual, con una cifras altísimas de desocupación, no es el mejor escenario para profundizar en políticas de igualdad. La crisis saca a relucir los modelos de gestión más conservadores donde el valor de la presencia i la disponibilidad horaria son elementos esenciales”.
Cuota de presencia femenina en la dirección
El informe de ICSA destaca que, mientras sólo hay un 10% de mujeres directivas, en el segmento de mandos intermedios las mujeres llegan al 30% y en las plantillas alcanzan el 46%.
“En este escenario –señala Aline Masuda, profesora de EADA y colaboradora del informe- la mujer tiene las de perder ya que suele sacrificar su carrera para poder conciliar trabajo y familia”.
“Además –prosigue la profesora- los estereotipos sociales todavía son muy acentuados en España. Existe una discriminación implícita, seguimos atendiendo a modelos culturales preestablecidos. Las virtudes de un jefe suelen asociarse a las cualidades masculinas, sino machistas: la competitividad, la asertividad, la agresividad o la autoridad”.
Adela Subirana, consejera la empresa constructora Sacyr y directiva de la Cámara de Comercio de Barcelona, va todavía más lejos: “Ninguna mujer debería dejar su puesto de trabajo, sin tener la seguridad de que será substituida por otra mujer; porque lo normal es que la suceda un hombre. A igualdad de oportunidad y preparación, hoy se elige al hombre”.
Las mujeres directivas tienen una mayor presencia en los departamentos de RR.HH. un 30%, seguidas de las que ocupan Direcciones Financieras, un 18%. La Dirección General la alcanzan solamente un 8,3% de mujeres directivas.
Diferencias salariales, comparativa europea
En cuanto a las retribuciones salariales a los cargos directivos, la mujer española sale perdiendo claramente respecto de las mujeres francesas e italianas. En Italia, un hombre cargo directivo cobra 111.250 euros por año, y una mujer italiana, 105.845 euros. Un directivo francés cobra de media anual 95.615 euros al año, y la directiva francesa 83.767 euros. En España un directivo cobra de media 81.551 euros al año, mientras que su colega mujer cobra 69.731.
Así pues en números absolutos, a las directivas españolas se les paga peor y la diferencia con sus compañeros varones es mayor. Hay que decir, sin embargo, que siempre hay algo peor; en Italia, pese a obtener remuneraciones más altas, las mujeres sólo representan el 7,2% de los cargos directivos en las empresas.
De todos los informes elaborados por diferentes entidades sobre ocupación laboral y brecha salarial entre hombres y mujeres, en este 8 de marzo de 2013, cabe concluir que la crisis ha incidido de manera feroz sobre la mujer trabajadora que cobra de media un 20% menos que los hombres (17% en Catalunya), que debe cargar con el peso de las responsabilidades económicas domésticas, al tener la mayoría de la familia en paro, que no puede acceder a un contrato fijo y que trabaja normalmente en jornadas parciales o reducidas.
La crisis que padecemos desde 2008 ha venido a perjudicar todavía más a la mujer trabajadora, pero no hay que olvidar que incluso antes de la crisis la brecha salarial entre hombres y mujeres ya era un hecho palpable, la discriminación en las empresas, pese a la equiparación con los hombres en preparación, una realidad sutilmente enmascarada a veces, y que el acceso a los cargos directivos es como siempre un muro casi insalvable.